El alcalde de Abárzuza, Alberto Pagola, ha asumido la Presidencia de la Mancomunidad Andía, formada por los ayuntamientos de Abárzuza, Lezaun, Salinas de Oro y los valles de Yerri y Guesalaz. Toma el relevo de Edorta Lezáun, alcalde del Valle de Yerri.

Lezáun ha destacado la "afinidad y buena sintonía entre los diferentes municipios y la predisposición a trabajar conjuntamente de los cinco ayuntamientos".

Por su parte, Alberto Pagola, que asume el cargo para el periodo 2022-2024, ha explicado que "se dará continuidad a los proyectos en los que venimos trabajando desde 2020 e impulsaremos nuevas iniciativas que dinamicen el territorio, en línea con lo que venimos haciendo, porque hemos visto buenos resultados".

La Mancomunidad Andía agrupa a 36 poblaciones y a más de 2.850 habitantes y se concibe como un instrumento de colaboración entre los municipios que permite impulsar proyectos conjuntos, atrayendo recursos para el territorio y evitando duplicar recursos, lo que se traduce en un ahorro de costes.

La Presidencia y la sede son rotatorias cada dos años entre los ayuntamientos que la integran. Las decisiones se toman en asamblea y cada consistorio tiene un voto ponderado y proporcional a su población.

Se creó en enero de 2007 como Mancomunidad de Servicios Administrativos Andía y, aunque se disolvió en octubre de 2008 porque no se consiguió que funcionara como tal, se vio el potencial del trabajo conjunto. Por ello, en 2010 se volvió a constituir con el objetivo de desarrollar las tareas de conservación de caminos y vías rurales; la protección del medio ambiente; el desarrollo de actividades o la gestión de instalaciones culturales y deportivas, y el turismo.

En 2020 se apostó por ampliar el ámbito de acción a la promoción de proyectos e iniciativas en el contexto del reto demográfico, para plantear soluciones conjuntas y colaborativas que favorezcan las oportunidades para que la gente viva, trabaje y disfrute en el territorio.

En junio de 2020 se decidió contratar a una persona para el impulso a diversas actuaciones enmarcadas en la Estrategia de Lucha contra la Despoblación en Navarra y el Plan de acción contra la despoblación de la sub-comarca de Montejurra, ambos del Gobierno de Navarra.

Desde entonces hasta ahora, el trabajo se ha centrado en vivienda, empleo, vida en común, cuidado del entorno y del planeta, y la colaboración con otras entidades, como la asociación turística Tierras de Iranzu.