Agilidad, destreza, rapidez, concentración, coordinación y puntería son algunas de las cualidades que se pueden lograr, siempre y cuando se siga un entrenamiento acorde, en el tenis de mesa, una disciplina deportiva que en Lodosa llevan practicando desde hace tres décadas pero que ha sido ahora, y gracias a un par de torneos navideños, cuando ha despegado y ha ganado muchos adeptos, sobre todo entre los más txikis de la población. De hecho, la localidad ribera es ahora mismo el único punto en el que se juega a nivel de club más allá de Pamplona.

Javier Martínez, entrenador desde hace al menos 22 años, recuerda que fueron los profesores José Miguel García y José Antonio Hernaiz, uno del colegio público y otro de La Milagrosa, los que embaucaron en un primer momento a varios niños y niñas, entre los que él se encontraba, a practicar tenis de mesa.

En la actualidad, y como parte del Club Polideportivo Lodosa, están involucrados en esta entidad unos 25 lodosanos y lodosanas de las categorías benjamín, alevín e infantil y también, y tras el campeonato del año pasado, también un grupo de adultos. “Se trata de una actividad amateur, aunque también salimos a competir a Larrabide dentro de los Juegos Deportivos. La idea es que se compagine con otras extraescolares, y es que no son cosas excluyentes, sino que jugar al tenis de mesa ayuda, por ejemplo, a tener mayor destreza o a mejorar competencias en ámbitos deportivos, educativos e incluso organizativos”.

Beneficios de este deporte

Las bondades de esta disciplina, cuenta Martínez, recalan en “la activación del cerebro, la mejora de la agilidad mental, el estímulo de los reflejos y la coordinación. No produce lesiones corporales y, además, es deporte y, a la vez, juego”; se puede adquirir velocidad y concentración a medida que se realiza una preparación física y mental, contribuye al desarrollo de la psicomotricidad, la resistencia, la circulación y la respiración.

Aunque “no es un deporte fácil”, apunta, sí que se está en una evolución continua. “Para perfeccionar hay que meter horas, como con todo. A cada uno se le explican los conceptos generales y las reglas del juego y, después, practicas poco a poco para que se afiancen los primeros golpes. Si vas acorde con tu nivel, te engancha y quieres más; es muy motivacional”.

Los entrenamientos son de dos horas por las tardes los lunes y viernes y a veces, también los miércoles. 

Necesidad de mejoras

Entre las demandas que tienen, insiste, está, por un lado, la necesidad de renovar el material, algo que harán realidad este año gracias a los presupuestos participativos; y es que en la actualidad tienen 6 mesas, pero solo 3 están en buenas condiciones y de esas, solo una es de competición.

Además, hay deportistas, como Pablo Martínez, de 9 años, que ya se codea con jugadores de primera línea y que incluso se ha proclamado campeón de la Copa Pirineos “y sería algo muy bueno que una o dos veces al mes pudiese venir algún entrenador a modo de tecnificación. Nos gustaría que más chicos y chicas pudiesen competir al más alto nivel”. 

De cara al futuro

Para Martínez, las expectativas a futuro pasan por “afianzar lo que tenemos y darle visibilidad a este deporte que, aunque minoritario, siempre ha estado ahí y ahora vuelve a tener mucha demanda y hay mucha gente con ilusión”; buena muestra de ello es que todos llegaron a entrenar después de Reyes con sus nuevas fundas y palas. 

“Cualquiera puede venir a jugar, cualquiera, independientemente de sus cualidades; los unos hacen buenos a los otros. Lo más gratificante es ver cómo vas subiendo el nivel; te costará más o menos, pero lo acabas consiguiendo. Además, y al ser un deporte individual, aunque a veces también juegan por parejas, no te puedes esconder porque eres tú el que tiene que coger las riendas y el que te pones a prueba”.

Campeonato en lodosa

Estos años, y gracias al torneo navideño que han organizado de la mano de la Federación Navarra de Tenis de Mesa bajo el patrocinio del IND del Gobierno de Navarra, han sido muchas las personas que han descubierto este deporte. Y es que la cita del pasado diciembre, con 16 mesas y 157 jugadores y jugadoras, contó con la participación de deportistas de primer nivel y la idea es que Lodosa se consolide como referente de este deporte en la zona. 

Imagen del exitoso torneo que albergó Lodosa durante las fiestas navideñas María San Gil

En la categoría de menores de 12 años ganó precisamente el lodosano Pablo Martínez, que se impuso a “la gran promesa aragonesa”, Lucas Álvarez, y de 12 a 16 años dominaron los integrantes de Oberena con un pleno en el pódium. Jesús Echeverría ganó entre los mayores de 16 años no federados, y en féminas, Araceli Serna revalidó el título logrado en 2022.

Por último, y en cuanto a los federados, Mikel Izkue, del Seghos-Segovia, se impuso a José Ignacio Vidaurre, del Club Natación Pamplona.

Allí entregaron trofeos, medallas y productos de Conservas Pedro Luis.