La reciente ocupación de dos viviendas en Allo ha despertado los ánimos de la mayor parte de los aproximadamente 1.000 habitantes de esta localidad de Tierra Estella. Se trata del allanamiento de dos inmuebles: uno situado en la misma plaza del ayuntamiento y otro también en el centro, en el número 1 de la calle Sancho el Fuerte. 

La indignación ha hecho que los vecinos y vecinas hayan respaldado la concentración convocada desde el mismo ayuntamiento de Allo. Así, en la plaza de los Fueros junto a la alcaldesa y concejales del consistorio de Allo, se congregaron varios centenares de personas que hicieron un gran círculo y donde varias de ellas expresaron sus temores y malestar. Así mismo, pusieron voz a sus preocupaciones por el temor que les habían infundido los ocupantes ilegales “estaba tendiendo la ropa y uno de ellos vino a casa y me amenazo de muerte”, aseguró un joven de la localidad. También hubo increpaciones aisladas que lo mismo censuraban el trabajo de los servicios sociales, los Gobiernos central y el foral, al Ayuntamiento o de las fuerzas de seguridad. Ese fue el caso del concejal Andrés Fernández (segunda legislatura en la lista del PSN), que criticó con dureza la política de Sánchez y de Chivite “esto es una vergüenza de país”, aseguró. Otras voces hablaron del valor de pagar impuestos y hubo gritos sobre quitar ayudas sociales. También hubo vecinos que indicaron que es el momento de defenderse con “protocolos y con ayuda legal”. 

Imagen de la concentración.

Dos ocupaciones

Todo empezó hace 15 días cuando, según la alcaldesa, Susana Castanera (PSN): “sufrimos dos ocupaciones”. Una en la plaza de los Fueros y otra en la calle Sancho el Fuerte. Desde el Ayuntamiento se pusieron en contacto con los propietarios para ver si iban a denunciar. La alcaldesa señaló que, ademas de la ocupación “también se ha producido una alteración grave de la convivencia”. “Desde el Ayuntamiento estamos en contra de la ocupación que es un delito ya tipificado, y defendemos el derecho de vecinos como Juan o Presen que tienen nombre y apellidos y han adquirido legalmente su vivienda y se ven privados de su uso”.  

Castanera aseguró que Allo es un pueblo acogedor “hemos destacado siempre por eso pero para gente que cumpla la legalidad y sea respetuosa con los vecinos y vecinas”. En este sentido, expresó su “más absoluta preocupación porque el tema es muy duro y porque estas ocupaciones podrían llamar a otras”. Con todo, también reconoció que aunque “la ley es la ley, nos han asegurado que los ocupantes van a tener que salir de estas casas. Otra cosa será el tiempo que tarden y de cómo dejen las casas”. En este sentido Castanera aseguro que lo que “queremos es que se vayan ya y que dejen las casas intactas”.