El 25 de noviembre fue designado por la ONU como el Día Internacional de la eliminación de la violencia contra la mujer. De nuevo este año nos volveremos a concentrar porque mujeres, niñas y niños han sido asesinadas y otras muchas niñas y niños se quedan huérfanos por la no aceptación de las decisiones que una mujer toma. Tenemos que seguir denunciando esta violencia.

Estos días hay muchas actividades que tratan de concienciar y me gustaría destacar la charla que Asun Casasola, madre de Nagore Laffage asesinada en Sanfermines, lleva más de diez años acudiendo a centros escolares para hacer reflexionar a los adolescentes sobre lo que supone el respeto, la igualdad, la empatía y lo hace de una manera sencilla con emociones y sentimientos llegando a cada persona que le escucha.

El respeto, un valor entre tantos, que hay que trabajar en todas las etapas de nuestras vidas. Es un pilar importantísimo, necesario, fundamental, que debe comenzar y seguir en la familia, en los centros escolares seguirá, así como en el deporte, en la política, en la sociedad. Debemos implicar a las y los adolescentes en los proyectos, en la sensibilización de nuestra sociedad y, como termina Asun los momentos que dedica al alumnado: “chicas y chicos quereros mucho”. 

Respetaros-Errespetatu zaitezte.