Hay muchos argumentos a favor del derribo de los Caídos, pero quiero hablar de uno que me da la sensación de que está pasando desapercibido: la relación de los católicos con el panteón.

Siempre he pensado por qué no son los creyentes católicos navarros los más interesados en el derribo. En el interior de la cúpula se representa a su querido San Francisco Javier exhortando a falangistas y carlistas al asesinato de miles de personas. Hay que recordar que la mayoría de estas personas eran católicos, y entre ellos, por lo menos había 2 curas. Eladio Celaya, nacido en Peralta y asesinado en Cáseda, y Santiago Lucus, nacido en Pitillas y asesinado en el Perdón. ¿Por qué fueron asesinados? Por defender a su gente….

El caso es que las pinturas de la cúpula son una exaltación del genocidio. En nombre de Dios, en una mano un crucifijo y en la otra un arma. En esa representación del interior de la cúpula se mezclan el santo, crucifijos, pistolas y fusiles dando una imagen de esa religión muy medieval, vengativa y genocida. A los propios católicos no les debería interesar que unas imágenes tan hirientes con su religión sean declarados BIC.

Si yo fuera creyente me molestaría, y espero que cuando por fin lo derribemos estén los católicos en primera fila con pico y pala esperando.

*El Autor es familiar de asesinados