Las 108 viviendas protegidas (31 VPT y 77 VPO) que se van a levantar en el antiguo colegio de Maristas van a retrasarse unos meses, por causas ajenas a la empresa promotora, ya que tienen que ver con la cerca de una veintena de recursos formulados por solicitantes de los pisos, que, a pesar de haber sido algunos adjudicatarios provisionales, habrían quedado fuera del proceso al no haber podido documentar, según los casos, los requisitos que se exigía en el baremo.

Fuentes del departamento de Vivienda del Gobierno de Navarra consultadas han confirmado que la promoción de vivienda protegida de Maristas, que ha generado gran expectación debido a que es la primera de estas características que se oferta en el Ensanche pamplonés, recibió 1.509 interesados para las VPO y otras 1.091 para las VPT. Por no cumplir el baremo se han dado 22 denegaciones a las VPO y 7 denegaciones a las VPT. Ante esta situación, se han formulado, siempre según fuentes del departamento, 17 recursos, 11 a las VPO y 6 más a las VPT, y hay 3 solicitudes más de VPO que estarían en plazo de recurso todavía. 

Una recreación del aspecto final de Maristas, con los dos bloques de la vivienda libre en el centro.

Esta semana, los adjudicatarios de las viviendas han recibido una carta de la empresa promotora Arrasate donde se les informa que los plazos previstos inicialmente para la entrega de la vivienda protegida van a verse alterados por esta situación sobrevenida. Este obstáculo deviene de que muchos de los adjudicatarios provisionales no habrían podido demostrar documentalmente que cumplían los puntos del baremo, por lo que el departamento de Vivienda ha denegado varias de las solicitudes, casi una treintena, como se deriva de los datos oficiales del Gobierno de Navarra.

La promotora ha informado a los adjudicatarios de que estas denegaciones están demorando el proceso, ya que conllevan una serie de trámites que se prolongan en el tiempo, y asimismo, se ha dado un mes para presentar los recursos, que ahora tienen que resolver los servicios jurídicos del departamento de Vivienda del Ejecutivo foral.

“Máxima prioridad”

Preguntado al respecto, desde el departamento de Vivienda se señaló que “son recursos a los que se está dando máxima prioridad”, aunque “han entrado muchos de golpe, por lo que se está haciendo todo lo posible para finalizar el proceso de resolución a finales de este mes o principios de marzo”. Sin embargo, mantienen la cautela: “Es una estimación aproximada, porque hay muchos para resolver”. 

Ante esta incertidumbre, desde la promotora se está pidiendo paciencia a los adjudicatarios definitivos, que ya han elegido vivienda, según el listado, y hecho el primer pago. Los precios oficiales de una VPO de 3 habitaciones están establecidos entre los 220.000 y 222.000 euros, y la subvención oscila entre 20.000-30.000 euros, por lo que es una oportunidad muy interesante en pleno centro de Pamplona. En la carta se les indica que mientras no estén resueltos los recursos, no se puede contar con el listado definitivo de adjudicatarios, de tal manera que la obra no se prevé que arranque “hasta mayo”, por lo que la “entrega” de las viviendas se prevé para el primer trimestre de 2026

Cuenta ya con la licencia de Obra

A expensas de estos obstáculos, la promoción de vivienda protegida, que será la primera en régimen de cooperativa de Pamplona, está ultimando los trámites previos para arrancar en cuanto esté todo resuelto, que podría ser a comienzos de abril, aunque siempre a expensas de lo que resuelva el Gobierno. Según confirmó Miguel Ángel Alonso del Val, del estudio AH Asociados, autor del proyecto, se está concluyendo ya el proceso de adjudicación de las obras para las 108 viviendas protegidas (Obenasa construye actualmente los dos bloques de vivienda libre). El pasado diciembre, además, recibió licencia de obra del área de Urbanismo municipal. 

El proyecto del Grupo Arrasate Taldea incluyen 48 viviendas libre y 108 viviendas protegidas en el entorno del antiguo colegio Santa María la Real Maristas. Los pisos van distribuidos en el edificio de Víctor Eúsa protegido, con una ampliación en altura, todo ello manteniendo la imagen original del mismo. De hecho, la licencia de obras ya advierte de que la “ampliación propuesta de la edificación mantendrá la gama cromática de la edificación existente” y, además, “se conservará el rótulo existente en fachada del antiguo edificio”.

Una imagen de la obra de la excavación ya concluida y el inicio de la estructura de las viviendas. CEDIDA

La obra de la vivienda libre llega a cota cero, una vez excavadas las plantas del parking  


Emerge ya la estructura de los dos bloques, cada uno de los cuales albergará 24 pisos

Mientras se demora el inicio de las viviendas protegidas, avanza, según los plazos previstos, la parte destinada a vivienda libre. En estos momentos, ya se encuentra superando la cota cero la obra del subterráneo (cuatro para parking y una comercial), que comenzó en septiembre de 2022, de tal manera que está “emergiendo ya la estructura de las viviendas”, 48 libres en dos bloques de 24 cada una.

Así lo confirmó Miguel Ángel Alonso del Val, del estudio AH Asociados, autor del proyecto: “Ha sido una obra complicada porque son cinco sótanos y, para que la gente se haga una idea, es como el tamaño del edificio actual pero hacia abajo”, de tal manera que hay muchísima profundidad, en torno a 18 metros, similar a la intervención que se hizo en su día en el parking de El Corte Inglés.

“Afortunadamente, no ha habido desvíos importantes. Siempre hay pequeñas incidencias, pero nada reseñable, pero es una obra que se tiene que hacer con mucha vigilancia y seguridad geológica”, para evitar “movimientos del terreno y del edificio antiguo”, precisa. Se calcula que se ha intervenido en unos 3.000 m2 de superficie

Alonso del Val señala que la obra de la vivienda libre (en la página del grupo Arrasate quedan a la venta dos dúplex ático, con precios que rondan entre los 855.000 y los 886.782 euros) se irá acompasando a la de la vivienda protegida, que ahora parece que se retrasa. 

Reconoció que ha habido “mucha expectación” con esta promoción, sobre todo en lo que atañe a la protegida, porque desde las primeras décadas del siglo XX (entre 1924 y 1927 se levantaron la llamadas casas baratas, o casas de Gorricho, entre las calles Olite, Leyre y Amaya) no se había hecho algo similar en el centro.

“Y más siendo una rehabilitación de un edificio protegido, que le añade un grado de complejidad mayor”, una actuación que demuestra que es posible actuar en edificios existentes sin que la ciudad pierda los valores arquitectónicos que el edificio tiene”.