Tanto las instituciones como los colectivos memorialistas de Navarra –en este caso de la mano de la Asociación de Familiares de Fusilados de Navarra en 1936 (AFFNA-36)– coinciden en la necesidad de mantener al senda iniciada en Navarra de defensa de la recuperación y reparación de la memoria histórica como principal baluarte contra la vuelta, con nuevos formatos, de las ideologías fascistas que en 1936 y durante el franquismo pasaron una honda factura humana y social en Navarra. Valcaldera, en su 87 aniversario, ha vuelto hoy a ser un símbolo de este mensaje plasmado en las intervenciones de un doble acto:primero en el paraje de Cadreita donde fueron asesinadas 52 personas y luego ante la antigua cárcel de Pamplona de las que fueron sacados esos prisioneros republicanos. Osasuna se ha sumado al homenaje ya que su presidente en la época se encuentra entre la lista de fusilados.

Acto de homenaje con motivo del 86 aniversario de la matanza de Valcaldera. Iñaki Porto

El primero de ellos, donde se ubicaba el corral junto al que se produjo la matanza y se encontraba la fosa en la que fueron enterradas las víctimas, ha acogido bajo un solo abrasador la primera parte de esta jornada. En él tomaron parte Eneko Arteta (que hizo referencia a su tío Honorino, único superviviente de la matanza que herido logró huir); Amaia Lerga, presidenta de Affna 36, organizadora del acto; Pello Guerra, periodista y escritor; y Carlota Rodríguez Yarnoz. 

La intervenciones han sido acompañadas de jotas (Natalia Martínez)alusivas a la represión sufrida por los republicanos y por el sonido del txistu de Kepa Vales. Entre las 80 personas presentes estuvieron representantes de la familia Húder, dos de cuyos miembros -Marino y Ramón Húder- fueron asesinados en esta corraliza de Cadreita.En concreto Carmen Yarnoz Húder, hija de Mari Carmen Húder hermana de Marino, junto a sus hijas Carlota y Carmela, y María Jesús Húder Ruiz de Alda, nieta de Serafín Húder, quién proclamó la II República desde la casa Consistorial en Pamplona. También ha asistido Martín Zabalza, director general de Paz y Convivencia del departamento de Memoria, Convivencia, Acción Exterior y Euskera cuya consejera y vicepresidenta del Gobierno de Navarra, Ana Ollo, se ha sumado al acto en el solar de la antigua cárcel junto a al equipo del Instituto de la Memoria.  

Además de diversos concejales y parlamentarios, han acudido al evento el Defensor del Pueblo, Patxi Vera, y el presidente de Osasuna, Luis Sabalza ya que el presidente del club Natalio Cayuela fue uno de los fusilados. El acompañamiento musical ha corrido a cargo el grupo La Topadora y se repitieron discursos y ofrendas florales. José Mª Asín ha recitado el poema “Decidme cómo es un árbol”, de Marcos Ana como preámbulo a las intervenciones de Marisa Veguilla y de la familiares de Marino Húder además de los responsables de la asociación AFFNA-36. Esta asociación ha puesto en valor tanto las actividades y actos en fechas conmemorativas como las normas y memoriales y se ha congratulado porque el Gobierno recién formado haya mantenido y reforzado el compromiso en esta línea en unos tiempos en los que en otras comunidades no muy lejanas se está produciendo una involución tanto en la parte simbólica como en la legal con la llegada de la derecha y ultraderecha al poder. Como colofón se ha colocado un tropezón en la calle José Alonso 2 donde nació Marino Húder. 

Doble mensaje de la asociación AFFNA-36

AFFNA-36 ha lanzado un doble mensaje. Por un lado el Rechazo a lo que pasa en otros lugares: “En muchos municipios y autonomías de formaciones políticas se oponen a la memoria democrática proclaman su intención de proceder a la derogación de la normativa”, dicen. Y por otro, como contrapunto, esta asociación pide al Gobierno y partidos que sean firmes el compromiso en memoria democrática (incluido en el acuerdo programático) de seguir desarrollando las leyes memorialistas y el apoyo a familiares y víctimas”. Yla ciudadanía, que profundicen los principios y valores indispensables para la construcción y consolidación de la democracia porque “sin memoria democrática no hay futuro en libertad”.