Concienciar y sensibilizar al alumnado sobre el consumo de drogas y formar a los futuros profesionales en la promoción de la salud. Este es el lei motiv del proyecto Pre(ad)diction de la Universidad de Navarra, que pusieron en marcha en septiembre de 2021 profesionales de las facultades de Enfermería y Arquitectura y al que se han sumado este curso Medicina, Farmacia, Educación y Psicología y Comunicación. Una iniciativa innovadora que busca tejer alianzas y generar espacios participativos en los que compartir experiencias y tomar las mejores decisiones.
“Dar la posibilidad a los estudiantes de hablar de temas que les interesan y que profesionales y pacientes vengan a contar sus experiencias. Promover ese pensamiento crítico y darles herramientas para aumentar los factores de prevención y disminuir los factores de riesgo”, explica Idoia Pardavila, de la Facultad de Farmacia.
La idea del proyecto nació de la colaboración entre profesionales de Enfermería y Arquitectura que vieron la necesidad de reflexionar a cerca de la prevención de las adicciones más frecuentes entre el alumnado (tabaco, alcohol y cannabis). Para ello, además de trabajar el tema en los distintos grados, decidieron abrir el debate y se pusieron en contacto con la asociación Antox para que pacientes y profesionales trasladen sus vivencias a los estudiantes. “Nos parece un privilegio y una oportunidad participar en este proyecto. Permite a futuros profesionales de diversas disciplinas sensibilizarse y formarse en la promoción de la salud”, asegura Andrea Corera, coordinadora general de Antox.
“Queremos promover pensamiento crítico y aumentar la prevención y disminuir el riesgo”
Alianza universidad- sociedad: Cambiar la percepción sobre las drogras
En cuanto Pre(ad)diction echó a andar, el interés de profesionales de otras facultades por sumarse al programa no se hizo esperar. Y es que el tema ocupa y preocupa en la Universidad de Navarra. Se unió Elena Puerta que imparte la asignatura Drogas y fármacos de abuso a alumnado de Medicina y Maira Bes, de la Facultad de Farmacia. “Surgió entonces la necesidad de contactar con Comunicación para conocer cómo se aborda este tema desde los medios de comunicación. Ellos crean cultura y la cultura es esencial para desnormalizar conductas que están normalizadas como el consumo de alcohol en atracón, el trabajo o el cannabis”, afirma Pardavila, que ve clave la formación de los futuros periodistas o cineastas. “Un reportaje, una serie o una película llega más que cualquier campaña de salud. Saber cómo enfocarlo, cómo abordar el tema con una sensibilización distinta es clave para ayudar a trabajar el estigma social”, remarca. Una opinión que comparte al 100% la coordinadora de Antox. “Desde los medios se pueden desmontar grandes mitos. Hay series en las que se hace apología del consumo y normalizan ir a clase drogados que son modelos de conducta para algunas generaciones”, reconoce Corera.
Este proyecto de innovación Pre (ad)diction parte de una investigación liderada por los profesores Idoia Pardavila, de la Facultad de Enfermería, Aitor Acilu, Amaia Zuzua, María Villanueva y Javier Antón, de la Escuela de Arquitectura. También participan Maira Bes y Silvia Carlos (Facultad de Farmacia), Elena Puerta (Facultad de Medicina), Bienvenido León y Elena Gutiérrez (Facultad de Comunicación) y Laura García y Luis Eudave (Facultad de Educación y Psicología). Además, también tiene un enfoque de Aprendizaje-Servicio al promover la formación del alumnado a partir de la experiencia real, favoreciendo la creación de entornos saludables. Para la creación de las actividades de prevención también han colaborado el Aula Saludable de la Facultad de Enfermería, Tantaka, la Clínica Universidad de Navarra y Antox.
Además, desde este curso 2023/2024, la implicación de docentes ha aumentado, siendo partícipes en esta edición las facultades de Medicina, Comunicación, Farmacia y Educación y Psicología.
Un reto que trabajan Elena Gutierrez con la asignatura Dirección en comunicación y Bienvenido León, con la de Producción televisiva. “Hemos producido 12 vídeos de 5 minutos centrado en esta temática. El tema ha impactado al alumnado. Hemos estado en reuniones de Alcohólicos Anónimos y muchos me decían que se habían dado cuenta de que era un tema serio y de que esas personas podían ser cualquiera de ellos. Me decían que están acostumbrados a agarrarse una cogorza todos los fines de semana sin pensar en sus consecuencias. El objetivo de que haya más concienciación e información para decidir está más que cumplido”, asevera León.
“Las series que normalizan ir a clase drogado son modelos de conducta para algunas generaciones”
Al hilo de esta reflexión, Pardavila también cree que el proyecto funciona y lo resume en una anécdota. “En una jornada de sensibilización del alumnado de Enfermería, un estudiante se acerco al final y les dijo que era adicto al cannabis y se le derivó otro servicio de la universidades. Para ellas fue muy satisfactorio ver que su charla había servido para que al menos uno hubiera dado el paso”.
La valoración del programa es muy satisfactoria. “Está cambiando su percepción de las drogas”, afirma la profesora de Enfermería, que recuerda que “las drogas no entienden de nivel social. Se dice que la universidad es la élite y, sí, es el nivel educativo más alto, pero son personas vulnerables, construyendo su identidad y con mucha presión porque se espera mucho de ella. El hecho de que no te pase nada si has consumido te sitúa en una situación más vulnerable para consumir otras sustancias”.
“La cultura de adicciones está empapando en la UN y el alumnado está más concienciado”
Sofía Neddermann, doctoranda en la Facultad de Enfermería, defiende la necesidad del proyecto y los logros alcanzados en estos tres años. “Debemos aprovechar el sitio en el que estamos. Muchos de nuestros estudiantes ocuparán puestos de relevancia en el futuro y es clave que tengan una cultura de las adicciones. Es gratificante observar que después de tres años de trabajo la cultura de adicciones está empapando en la Universidad gracias a los testimonios que vienen a las mesas redondas y cómo el alumnado está más concienciado”.
► 270 millones de personas de entre 15 y 64 años, consumieron drogas psicoactivas en 2018. Esto supone un incremento de un 30% con respecto a 2009.
► Un 29% de adultos de la Unión Europea ha consumido drogas ilegales al menos una vez en sus vidas.
► Un 17,1% de los jóvenes de entre 15 y 24 años son consumidores de cannabis.
