Un grupo de activistas contra el cambio climático tiñió este sábado de verde un canal del Danubio, en Viena, en protesta por la celebración la semana que viene en esa ciudad de una conferencia con docenas de empresas y operadores de gas, a los que los manifestantes acusan de lavar la imagen de ese combustible.

"Para frenar la creciente catástrofe climática, Austria y Europa deben dejar de quemar gas lo antes posible y abstenerse de explotar nuevos yacimientos de gas", denunció en un comunicado el grupo Extinction Rebellion, responsable de la protesta.

Unos 80 activistas, 30 según la Policía, bloquearon hoy un puente sobre el canal del Danubio que discurre por el centro de Viena, y tiñeron de verde el agua con un producto que aseguraron era biológico y totalmente inocuo, y que desaparece tras un par de horas.

Esta protesta es el comienzo de una serie de acciones contra la celebración a partir del lunes en Viena de la European Gas Conference, un encuentro de la industria del gas durante el que, asegura en su página web, se discutirá la seguridad del suministro de ese combustible a Europa, según los manifestantes.

Los activistas acusan a la conferencia de ser un intento de "lavar la cara" del gas.

"Aquí en Viena, a puerta cerrada, el lobby del gas quiere imponer una vez más sus destructores intereses de los combustibles fósiles", ha denunciado Anselm Schindler, portavoz de BlockGas, una asociación de grupos de diferentes países de Europa que asegura luchar "por la justicia climática y la justicia social".

Este colectivo ha anunciado diferentes protestas, con activistas llegados de toda Europa, para intentar bloquear la celebración de la conferencia, que se celebra desde el lunes al miércoles en un hotel cuyo nombre no se ha revelado y a la que no tendrán acceso los medios de comunicación.

La plataforma Fridays For Future también ha anunciado su participación en las protestas.