madrid - El ministro de Defensa, Pedro Morenés, provocó ayer una oleada de críticas en Catalunya por asegurar que, ante una eventual declaración de independencia, las Fuerzas Armadas (FAS) cumplen y cumplirán “estrictamente” la Constitución y las leyes. Unas palabras que fueron interpretadas como una amenaza por el Gobierno catalán y los grupos de oposición.
“Aquí cada uno tiene que cumplir con su deber y eso es las Fuerzas Armadas, los gobernantes y los gobernados. Todo el mundo tiene que cumplir con su deber y nada más. Y si todo el mundo cumple con su deber le aseguro que no hará falta ningún tipo de actuación como la que usted estaba planeando”, respondió Morenés en RNE a una pregunta sobre el papel que jugarían los Ejércitos ante una declaración de independencia.
Morenés incidió en que las Fuerzas Armadas “son absoluta y perfectamente democráticas” y están “sujetas al estado de derecho como cualquier otra institución” y recordó que todos los responsables políticos, incluidos los catalanes, han jurado “cumplir y hacer cumplir la Constitución”. Más tarde, cuando fue preguntado por los periodistas en el Senado por sus declaraciones en la radio, Morenés se limitó a responder: “Lo que he dicho es que todo el mundo en España está sometido a la ley”.
miedo El conseller de Presidencia de la Generalitat, Francesc Homs (CDC), tildó de “incalificables” e “inclasificables” las declaraciones de Morenés, palabras que a su juicio no son “de los tiempos actuales, de un contexto democrático”. La consejera de Bienestar Social y vicepresidenta del Gobierno catalán, Neus Munté, añadía que “solo alguien que tiene miedo a la democracia, porque las elecciones como las que se van a celebrar el Catalunya son ante todo democráticas, puede hacer una afirmación de esas características”. También respondió al ministro de Defensa el portavoz de Convergencia Democrática de Catalunya (CDC), Pere Macías, quien dijo a Morenés que es “un iluso” si cree que con sus declaraciones sobre una hipotética independencia de Catalunya va a amedrentarles.
El candidato de Catalunya sí que es pot (ICV, Podemos y Equo), Lluís Rabell, tachó de “energúmeno” y “mercader de armas” al ministro de Defensa, mientras que el dirigente de Podemos Íñigo Errejón calificó sus palabras de “profundamente irresponsables” y dijo que se trata “de una amenaza a los catalanes y también a la democracia de España”.
El primero en responder al ministro fue, no obstante, el portavoz de ERC en el Congreso, Joan Tardà, quien le acusó de ser un “insensato” y “éticamente una persona muy pero que muy low cost”. “Es una vergüenza que una persona que teóricamente es culta y viajada diga tantas sandeces”, dijo Tardà.
Preguntado por este asunto, el portavoz del PSOE en el Congreso, Antonio Hernando, reconocía tener la “impresión” de que las palabras de Morenés son “la típica declaración absolutamente innecesaria por parte del ministro”, aunque añadía que le “gustaría leerla entera”.
También la exministra de Defensa y actual candidata del PSC a las elecciones generales, Carme Chacón, se refirió a las palabras de Morenés para asegurar que las Fuerzas Armadas “cumplen perfectamente con la legislación” y que no tienen “ningún interés en algo como lo que sugiere” el ministro de Defensa.
Por último, la candidata de Ciudadanos a la Generalitat, Inés Arrimadas, sostuvo que las palabras de Morenés demuestran que el PP “sale a perder el partido” de las catalanas del 27-S, porque ya están pensando en “cómo reaccionarán” si ganan los independentistas.
Preguntada por esta polémica, la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, quiso dejar claro que se está “tratando de hacer un debate donde no lo hay” y que “no hay ninguna perspectiva ni ninguna intención ni ninguna previsión” por parte del Gobierno sobre el uso de las Fuerzas Armadas en Catalunya. “Estamos en que se cumpla la ley, no estamos en otro tipo de intervenciones”, recalcado Sáenz de Santamaría en declaraciones a La Sexta. Este tipo de cuestiones, agregó, pueden generar “un gran debate” y “venir muy bien” a los independentistas” que tratan de “sacar de eso un gran rendimiento” cuando, insistió, “de eso no estamos hablando”. El Ministerio de Defensa colgó en su página web la entrevista íntegra de Morenés, con el objetivo de difundir las palabras exactas del ministro sobre Catalunya.
En cuanto a la ofensiva judicial, que se suma a la política, el PP, gracias a su mayoría absoluta, logró ayer que la Junta de Portavoces del Congreso dé su visto bueno a la tramitación exprés de la reforma de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional (TC), que podrá estar aprobada antes de que finalice este mes, pese al rechazo de toda la oposición.
La Junta de Portavoces acordó incluir en la sesión plenaria del próximo miércoles, tras el debate de Presupuestos, la toma en consideración de la proposición de ley del PP, que plantea modificar la Ley Orgánica del TC para dotar al alto tribunal de potestad para hacer cumplir sus resoluciones y sancionar a cargos públicos que desoigan sus sentencias.
Rajoy y el sentido común
Incertidumbres. El presidente del Gobierno , Mariano Rajoy, apeló ayer al “sentido común” para que las “incertidumbres” políticas no entorpezcan el ciclo de recuperación económica. Lo dijo apenas 72 horas antes de que comience la campaña de las elecciones catalanas del 27 de septiembre, una cita a la que no se refirió explícitamente, aunque sí hizo veladas alusiones a las consecuencias que puede acarrear. En su visita a la fábrica de Seat en Martorell con motivo del 40º aniversario del Centro Técnico de esta factoría, Rajoy interpretó que las “incertidumbres en lo político” son el único riesgo que tiene por delante España.