Navarra Suma ha empezado 2021 como terminó 2020: alimentando la campaña contra el consejero Manu Ayerdi, a quien el Supremo ha abierto causa penal sin que por el momento se haya pronunciado sobre si investiga al titular de Desarrollo Económico por las ayudas públicas que recibió el proyecto Davalor Salud.

Tras la Mesa y Junta, el líder de Navarra Suma, Javier Esparza, retomó el lenguaje duro contra Chivite, de quien dijo que está “atada de pies y manos” porque “le debe mucho a Geroa Bai”. Por esta razón, Esparza ha pedido la comparecencia de Chivite, pues dice que “ningún político de Navarra en los últimos 25 años ha estado en una situación como esta”. “Hace un mes que se conoció el auto y el señor Ayerdi sigue aferrado a su sillón” y “Chivite sigue manteniendo a un consejero sin pedirle ningún tipo de responsabilidad”, denunció, poco antes de quejarse de que habría una “doble vara de medir”, porque “a ver qué pasaría si en esta situación estuviese un consejero de Navarra Suma”.

Navarra Suma también ha conseguido que los servicios jurídicos del Parlamento vayan a elaborar una nota-informe sobre la obligatoriedad del departamento de Cohesión Territorial para facilitar información a los parlamentarios. La petición se produce, según la versión de Navarra Suma, porque el departamento, en lugar de facilitarles la información sobre carreteras en formato digital, les insta a acudir físicamente a hacer las consultas.