MADRID. La violencia ha regresado este domingo a las calles de Chile, con epicentro en la Plaza Italia de la capital del país, donde se registran enfrentamientos entre grupos violentos y fuerzas de seguridad, en medio de una nueva movilización ciudadana en protesta por las desigualdades del país.

La céntrica plaza de Santiago registra la llegada de masiva de grupos de gente desde todas las avenidas que confluyen allí, algunos en actitud violenta, lanzando adoquines y piedras a los agentes policiales, tumbando semáforos, señales y destrozando mobiliario urbano.

Otras personas, protestan pacíficamente con cacerolas, en una nueva muestra del descontento ciudadano por la carestía y desigualdades del país que, con la subida del precio del billete del metro como punta de lanza, estalló la semana pasada, derivando en violentos disturbios, desde la quema de estaciones de metro, hasta destrozos de mobiliario y multitud de saqueos a comercios y supermercados.

Por estos disturbios, la Región Metropolitana, en la que se ubica la capital del país, se encuentra en estado de emergencia, lo que ha hecho que sea el Ejército quien asuma la responsabilidad de mantener el orden.

En otras cuatro regiones del país rige también esta medida, después de que el estallido violento se expandiera por el país: Valparaíso (centro), Concepción (sur), las comunas de Coquimbo y La Serena, en la región de Coquimbo (norte) y la comuna de Rancagua (centro) desde la madrugada de este domingo.

Además, para Santiago, Valparaíso y Concepción rigió durante la noche y hasta las 7:00 hora de esta mañana (10:00 GMT) un toque de queda que prohibió la libertad de movimientos ciudadana, pese a lo cual, aunque en menor medida, siguieron registrándose algunos incidentes, principalmente saqueos en comercios y supermercados, que todavía se registraban en el amanecer de este domingo.

Para Concepción, las autoridades ya han adelantado que esta noche volverá a regir el toque de queda, a partir de las 22:00 hora local y hasta las 6:00 hora local (01:00 GMT-9:00 GMT del lunes).

En total, unos 3.000 militares se encuentran realizando labores de contención de la violencia, junto a otros 5.000 unidades entre carabineros y agentes de la Policía de Investigaciones (PDI).