- En el día en el que terminaba el plazo que Estados Unidos había dado a China para encerrar su consulado en Houston, el país asiático retalió y ordenó a EEUU que cerrara su consulado en Chengdu, al suroeste del país. China cumplió su amenaza y este intercambio de cierres de consulados entre los dos países se transformó en el último capítulo de las crecientes tensiones entre las dos principales potencias mundiales.
En este contexto, varios agentes federales estadounidenses y fuerzas de seguridad locales entraron el viernes en el Consulado General de China en Houston, Texas, después de cumplirse el plazo previsto por Washington para su cierre.
Los agentes ingresaron en el edificio 40 minutos después de que el plazo concluyera, según el diario local Houston Chronicle. Mientras, equipos de seguridad con camisetas con el logo del Departamento de Estado de EEUU vigilaban la entrada trasera.
Momentos antes de cumplirse la fecha límite, la Policía de Houston había establecido una barrera alrededor del edificio, que el Gobierno chino ha ocupado durante cuatro décadas, y cerrado las calles aledañas.
Varios miembros del Departamento de Estado de EEUU indicaron el viernes que el Consulado General de China en Houston estaba implicado en una investigación por fraude llevada a cabo por una institución de Texas y que los miembros de la misión diplomática “estaban directamente involucrados en las comunicaciones con los investigadores y les guiaron sobre qué información recopilar”.
En respuesta, el Gobierno chino expresó ayer su “profunda insatisfacción” y su “firme oposición” a la entrada de las fuerzas de seguridad estadounidenses en el consulado de Houston, en el último episodio de las tensiones diplomáticas entre ambos países.
Un ciudadano de Singapur se declaró culpable el viernes de actuar bajo la dirección de responsables de Inteligencia chinos para obtener información confidencial de oficiales estadounidenses, según anunció el Departamento de Justicia de Estados Unidos. Yeo Jun Wei, también llamado Dickson Yeo, se declaró culpable en un tribunal federal de Washington D.C. por el cargo de actuar dentro de los Estados Unidos como “agente extranjero ilegal”.
Por otro lado, un grupo de manifestantes afines a Pekín se concentró ayer en el consulado de Estados Unidos en Hong Kong para pedir el cierre de la misión diplomática en plena crisis diplomática entre las misiones consulares de ambos países.
En respuesta a la tensión con EEUU, los miembros del grupo Defensores de Hong Kong realizaron ayer su protesta particular frente al consulado del territorio chino, en la que arrojaron huevos a fotografías del presidente Donald Trump y su secretario de Estado, Mike Pompeo, mientras les describían como “pecadores” y “demonios”.
