bruselas - El borrador de presupuestos que ha remitido el Gobierno a Bruselas ha causado una impresión “positiva” en el jefe de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y así se lo trasladó al presidente Pedro Sánchez en una reunión que ambos han mantenido antes de la cumbre de líderes europeos, según informaron fuentes de Moncloa. Las mismas fuentes señalaron que el encuentro duró entre 20 y 30 minutos y se abordaron el presupuesto español y las perspectivas económicas. El jefe del Ejecutivo comunitario le trasladó que la primera impresión ha sido “positiva” con respecto a otras, en clara alusión al caso de Italia.

El Gobierno envió el pasado lunes su plan presupuestario para 2019, que recoge un objetivo de déficit para el próximo año que es cinco décimas superior al objetivo de déficit público acordado entre España y Bruselas (1,8% del PIB frente al 1,3% fijado). Bruselas, sin embargo, no ha tomado todavía ninguna decisión sobre el presupuesto español y dará su opinión formal sobre el borrador a finales de noviembre, en principio en la semana que comienza el lunes 19.

El análisis de Bruselas en el caso español se centrará en el ajuste estructural establecido en la senda de consolidación pactada, que obliga a España a realizar un esfuerzo equivalente al 0,65% del PIB. El Gobierno ya anunció hace meses que utilizaría la flexibilidad que permiten las reglas fiscales europeas para reducirlo al 0,4%. Si el Ejecutivo comunitario duda de que España vaya a cumplir el esfuerzo estructural que se le requiere para el próximo año, tiene la posibilidad de enviar una carta a las autoridades españolas como muy tarde el próximo martes para pedir aclaraciones. Si no son convincentes, Bruselas podría reclamar entonces un nuevo presupuesto.

En su encuentro, Sánchez y Juncker también tuvieron ocasión de abordar el estado de las negociaciones del brexit, una situación que discuten más en detalle los jefes de Estado y de Gobierno de la UE a 27 en una cena este miércoles en Bruselas. La conversación sirvió para repasar las líneas rojas del bloque comunitario en sus contactos con Reino Unido y la unidad con la que los 27 están llevando esta negociación, si bien no hablaron del protocolo sobre Gibraltar que acompañará el Acuerdo de Salida y que España da prácticamente por acordado.

En su reunión de hoy, según las fuentes españolas, Sánchez y Juncker han hablado también de las próximas perspectivas financieras de la Unión Europea y de otros asuntos como la crisis migratoria o las negociaciones entre el Reino Unido y la UE para hacer efectivo el brexit.

Antes de verse con Juncker, el presidente del Gobierno fue recibido por el presidente del Consejo europeo, Donald Tusk, durante un encuentro que también duró una media hora. En esta ocasión, la discusión se centró en asuntos que discutirán los líderes de la UE en la segunda jornada de la cumbre, hoy, ya con Reino Unido en formato a 28, y que dedicará uno de los debates a la situación de la inmigración. En este punto, Sánchez subrayó el aumento de las cifras de llegadas de inmigrantes irregulares por la ruta del Mediterráneo occidental, que más afecta a España, y en este contexto el presidente del Gobierno incidió en la necesidad de reconocer el papel que juega Marruecos para contener esta presión migratoria, según resumieron fuentes del Gobierno.

El líder del PP, Pablo Casado, viajó también ayer a Bruselas para participar en la reunión del Partido Popular Europeo previa a la cumbre de la UE y ya había advertido de que alertaría en la capital comunitaria de las consecuencias negativas si el proyecto presupuestario del Gobierno se aprueba, actitud que Sánchez consideró la víspera como una “deslealtad impropia de un partido de Gobierno”.

A su llegada, Casado, que cifró en 10.600 millones el agujero presupuestario, acusó a Sánchez de “financiar una campaña electoral de dos años” con el Presupuesto y reclamó a la canciller alemana, Angela Merkel, que se aplique “el mismo baremo de exigencia” que con el Gobierno del PP. y le ofreció “una alianza hispano-germánica” en la UE en el encuentro bilateral que ambos mantuvieron en los márgenes de la cumbre de los líderes populares en Bruselas. El líder del PP puso en valor el peso de España como “cuarta potencia de la UE” cuando salga Reino Unido. - D.N.