barcelona - Miles de persones se concentraron ayer frente al centro penitenciario de Lledoners, Barcelona, para apoyar a los presos soberanistas tras presentarse los escritos de la Fiscalía y la Abogacía General del Estado, que piden penas de hasta 25 años de cárcel. Con el lema Seguiremos determinados, venceremos y convocados por las Assembles de Defensa de les Institucions Catalanes (Adic), los gritos de los asistentes al acto, donde también estuvieron el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y varios familiares de los presos, se resumieron en tres mensajes: a favor de “abrir las cárceles” para liberar a los presos aprovechando que están en centros gestionados por la Generalitat, a favor de convocar una huelga general, y para reclamar unidad entre los partidos independentistas.

Por su parte, el representante de las Adic, Enric Tudó, llamó a no pedir la absolución de los procesados en el juicio, sino la anulación de la causa, aunque avisó de que “esto quiere decir estar dispuestos a la desobediencia”, y reclamó abrir las cárceles.

epístolas desde la cárcel A través de una carta leída por su hermana, el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, mostró su solidaridad con los presos y expuso: “Ha llegado la hora de pasar de la indignación a la acción”, aunque no precisó qué suponía exactamente esto. Asimismo, los presos también hablaron a través de sus familiares. En esto, el líder de ERC, Oriol Junqueras, sostuvo que el juicio sobre el proceso independentista será un castigo a los líderes soberanistas, pero “la cárcel será su peor decisión”.

Asimismo, durante el acto llegaron señales desde dentro de la cárcel. En primer lugar, se vieron brazos agitando toallas para saludar a las personas que, desde los terrenos próximos al centre penitenciario, gritaron Libertad y Os vamos a sacar.

En segundo lugar, desde la megafonía del acto y con todo el público en estricto silencio, se dio las buenas noches uno por uno a todos los presos, tras lo que Junqueras contestó desde la lejanía con un nítido Bona nit desde dentro los muros de la prisión.

En el encuentro también intervino el líder de los Mossos per la Independència, Albert Donaire, que expresó su apoyo por el exconseller de Interior Quim Forn: “Seguimos a su lado y lo reconocemos como el conseller legítimo del Departamento de Interior”.

Por su parte, uno de los oradores leyó una a una las penas que se piden para todos los dirigentes soberanistas encausados, mientras los asistentes clamaron a favor de la libertad y la independencia, así como emitieron silbidos en contra de la Fiscalía.

Finalmente, todos los dirigentes soberanistas recibieron el apoyo de los asistentes frente a Lledoners, a excepción del exconseller Santi Vila, quien dimitió del Govern un día antes de que el Parlament proclamara la República, por lo que recibió gritos de botifler y traidor cuando se escuchó su nombre por megafonía. - E.P,