Londres - El acuerdo para la salida de la UE está “completamente acordado”, aseveró ayer la primera ministra británica, Theresa May, lo que dificultaría la posibilidad de que se hagan cambios, tal como piden muchos conservadores y la oposición política en Reino Unido. “El acuerdo de salida está completamente acordado, sujeto por supuesto a que se alcance un pacto total sobre la futura relación” comercial, lo que debe suceder en una reunión del Consejo Europeo el pasado domingo, afirmó.

May defendió el polémico acuerdo de brexit que ha consensuado con Bruselas en un discurso en el congreso anual de la patronal de empresarios CBI, cuyo presidente, John Allan, brindó su apoyo al pacto. “El acuerdo no es perfecto, ya lo sabemos. Pero estamos tratando de alcanzar un pacto que respete el resultado del referéndum y minimice el daño a nuestra economía”, declaró Allan, ante unos 1.500 empresarios.

La dirigente conservadora señaló que “ésta será una semana de intensas negociaciones” y adelantó que espera “fijar los detalles completos del marco que apuntalará la futura relación” bilateral. “Tengo la confianza de que podremos cerrar un acuerdo en el Consejo Europeo, que después yo pueda llevar a la Cámara de los Comunes”, agregó la primera ministra, que se mantiene firme sobre lo que ha negociado pese a las críticas generalizadas en su país.

May fue muy aplaudida cuando defendió su acuerdo ante un participante que cuestionó que el pacto vincularía al Reino Unido con la UE “indefinidamente”, y subrayó que el borrador consensuado asegurará “que pueda llevarse a cabo un comercio sin fricciones”.

Oposición La jefa del Gobierno británico insiste en que el acuerdo preliminar que ha pactado con Bruselas, y que debe ratificarse el domingo junto con el marco para la futura relación comercial, “es el mejor para el país”, a pesar de que la oposición política ya ha adelantado que no lo apoyará cuando se vote en la Cámara de los Comunes. Además, la líder tory afronta una posible moción de confianza por parte de diputados de su partido, que consideran que el pacto amenaza la integridad territorial del Reino Unido en Irlanda del Norte. - Efe