madrid - El cabecilla de Gürtel Álvaro Pérez, el Bigotes, declaró ayer en la Audiencia Nacional que todos los contratos que fueron adjudicados a la empresa de la trama en Valencia, Orange Market, lo fueron por orden del expresidente valenciano Francisco Camps o con su conocimiento. No obstante, en su declaración ante el juez del caso Gürtel, José de La Mata, quiso aclarar que por esas adjudicaciones no hubo contrapartida, no fueron a cambio de algo, según fuentes presentes en la declaración, que se extendió tres horas.

Respecto a los contratos por los que ahora se investiga a Camps, que declara hoy como imputado, El Bigotes ha comentado que el expresidente valenciano le dijo que le daba el contrato de Fitur 2009 en noviembre de 2008 cuando iban juntos paseando cerca de la casa de Camps. Según El Bigotes, Camps estaba al tanto de todos los contratos que daba la Generalitat a Orange Market y daba las órdenes para su adjudicación.

Durante el interrogatorio, negó que esos contratos concedidos a Orange Market por parte de la Generalitat Valenciana fueran pagos encubiertos por la deuda que tenía esta empresa de eventos con el PP. Él, dijo, ejercía de comercial para las empresas de la Gürtel en Valencia y se limitaba a eso, sin entrar en los detalles de los contratos ni el papeleo.

El Bigotes reconoció además haber cambiado su versión respecto a previas declaraciones en el juzgado de instrucción de Valencia que lleva el caso de la Fórmula 1 porque ha cambiado de abogado y el nuevo letrado le ha aconsejado decir toda la verdad. Antes, puntualizó, no contaba todo lo que sabía. - D.N.