pamplona - Ha pasado más de un mes desde que el Parlamento de Navarra aprobó las conclusiones de la comisión especial que desde 2016 investigó la desaparición de Caja Navarra. Pero las importantes revelaciones avaladas por la Cámara y la airada reacción de UPN, PSN y algunos de los exdirectivos de la entidad han provocado que el debate siga vivo aun cuando está a punto de comenzar la campaña electoral.

Ayer, el portavoz parlamentario de Geroa Bai y candidato al Congreso de los Diputados, Koldo Martínez, achacó al “vértigo que les ha provocado las revelaciones de la comisión” el manifiesto que ocho ex altos cargos y personas vinculados con Caja Navarra, entre ellos Goñi o Asiáin, firmaron en protesta por el escrito de conclusiones de Geroa Bai, EH Bildu, Podemos-Orain Bai e I-E que el Parlamento elevó a definitivo el pasado 28 de febrero. “No esperaban que la comisión diese tantos frutos, y tienen razones para la preocupación porque les hemos desmontado el falso relato que han construido en torno al final de Caja Navarra”, puntualizó Martínez.

¿Cuál es ese “falso relato”? El que según Martínez se publicó en un “remitido publicitario” de Diario de Navarra y que contribuye a vender esa imagen de que la entidad financiera desapareció por efecto de un tsunami regulatorio, y no de una mala gestión. Martínez, en casi una hora de rueda de prensa, fue puntualizando todos los argumentos suscritos por José Antonio Asiáin, José Antonio Sarría, Luis Colina, Ricardo Martí-Fluxá, Juan Cruz Alli, Javier Martinena, José María Zarranz y Enrique Goñi, defendiendo que el escrito de conclusiones del cuatripartito es “un texto ponderado, sosegado, basado en evidencias y con fuentes documentadas”.

Para el candidato de Geroa Bai, “Can ha desaparecido y ha causado daños directos e imputables a errores en la gestión” y criticó que el exdirector general de Caja Navarra Enrique Goñi y “quienes le apoyan, han construido todos estos años un relato que falta a la verdad”. Frente a ello, defendió el “rigor técnico” con el que, según dijo, ha trabajado la comisión de Can e incidió en que en las conclusiones aprobadas “quedan claras las responsabilidades de Goñi y su equipo”.

“Nosotros no somos quién para decir si ha habido delito o no, hemos analizado los datos, hemos sacado conclusiones y creemos que hay responsabilidades sociales, político-institucionales y los tribunales serán quienes digan si hay responsabilidades judiciales o penales”, expuso. El Parlamento ya ha solicitado que se remitan las conclusiones a la Fiscalía de Navarra.

los puntos El primer punto que atajó es el relativo a la situación anterior a la llegada de Goñi a la caja. Martínez explicó cómo en la gestión anterior -con Lorenzo Riezu al frente- la solvencia era “un elemento central de la gestión”, el modelo expansivo prudente y el espíritu el propio de una entidad “de fundación pública” frente a un modelo expansivo y con menos control que propició el final de Caja Navarra.

Sobre ese modelo expansivo, Martínez aseguró que la compra de oficinas -“una por semana”- se produjo “en plena burbuja” y con “caos”, lo que derivó en un “coste extraordinario para Can”. Las prejubilaciones con Goñi contribuyeron a una pérdida de capital humano y algunas operaciones como Oesía propiciaron una “pérdida en toda regla” de 90 millones que nunca se provisionaron. A eso hay que sumar el primer año de pérdidas en la actividad ordinaria (2008) y operaciones como la absorción de CajaSol, que debilitaron a la entidad y de cuya repercusión tenía que ser conocedor Goñi, según Martínez. “No hay ningún argumento económico para esta operación”, consideró, para cuestionar la figura del Banco de España que rompió su papel de “árbitro neutral” y que apoyó la integración pese a que en un informe de 2010 corroboró la inviabilidad de la entidad andaluza. Y, por si fuera poco, unos políticos que ya no fiscalizaban, pero que seguían cobrando. “Los representantes institucionales cobraron dietas por controlar y tutelar, pero solo cobraron. Ni controlaron, ni tutelaron”.

También contestó a los ex altos cargos cuando afirmaron que la pérdida de Can no tuvo efecto en la recaudación, cuando la absorción de la entidad por CaixaBank le permitió al banco catalán “maquillar” un año de pérdidas (2013) con créditos fiscales, “impuestos que convierten las pérdidas en beneficios”. Y no quiso pasar la ocasión de plantear por qué aseguran con tanta vehemencia que Can no hubiese podido seguir en solitario. Puso el ejemplo de Caja Rural, que con un modelo similar -tanto de mercado como de implantación- ha sabido capear la crisis -igual para todos- e incluso ha ganado cuota de negocio en Navarra. “Si no llega a ser por la comisión de investigación en el Parlamento, el relato y la farsa de Goñi hubiera prevalecido”. “Hoy podría existir un banco Can con su centro de decisión y su capital humano en Navarra. No era obligatorio fusionarse y, de hacerlo, se podían haber buscado mejores socios”, sostuvo.

Por último, criticó la postura mantenida por el PSN a lo largo de la comisión de investigación en la Cámara y preguntó a la líder de los socialistas navarros, María Chivite, “por qué votaron a favor de la comisión y convocaron comparecientes” visto el papel desempeñado por Guzmán Garmendia. “¿Qué ha pasado entremedio con el PSN? ¿Por dónde les tienen pillados?”, se preguntó.

“caja navarra desapareció después de la década de goñi”

El modelo de expansión y prejubilaciones fue un “caos” y tuvo “un coste extraordinario para Caja Navarra”, sostuvo Martínez.

“la operación de oesía con cajasol provocó la pérdida de 90 millones”

Los 90 millones que se provisionaron a Oesía “no revirtieron nunca”, lo que hace de la operación una “pérdida en toda regla”.

“la solvencia dejó de ser un objetivo de gestión y se veía como una rémora”

La llegada de Goñi acabó con un modelo prudente de banca minorista que había tenido ratios de solvencia sólidos.

“los políticos cobraban dietas, pero ni tutelaban ni controlaban”

Las dietas crecían al ritmo en el que descendía la capacidad fiscalizadora de un Gobierno de Navarra que no supervisó qué pasaba.

“no existía un argumento económico para absorber a cajasol”

Caja Navarra, ya en Banca Cívica, se hizo cargo de CajaSol. La entidad andaluza fue un lastre que abocó a Can a su final.

“goñi conocía las pérdidas esperadas de cajasol”

Martínez ve imposible que Goñi no supiese cuál era la situación de CajaSol. “Sin un plan B, puso todos los huevos en la misma cesta”.

“¿Por dónde tienen pillados los firmantes al psn?”

Por último, criticó la pasividad de Garmendia (PSN), quien ha aceptado las tesis de UPN sobre el final de Caja Navarra.