Londres - El líder laborista, Jeremy Corbyn, lanzó ayer la campaña de su partido para los comicios europeos con la promesa de “unir” al Reino Unido y de apoyar otro referéndum en este país si no prospera un acuerdo “sensato” del brexit. El político socialdemócrata eligió la localidad de Chatham, en el sureste de Inglaterra, para poner en marcha esta campaña, en momentos críticos por la aparente falta de avances entre el Gobierno conservador y la oposición laborista para consensuar un pacto del brexit que pueda ser aprobado por el Parlamento británico. El Reino Unido tiene la fecha del 31 de octubre para su salida de la Unión Europea (UE), tras verse obligado a solicitar un retraso del divorcio -que estaba previsto para el pasado 29 de marzo-, después de que el texto negociado entre Londres y Bruselas durante casi dos años fuese rechazado hasta en tres ocasiones por la Cámara de los Comunes.

Así, el país se ha visto obligado a acudir a las elecciones europeas del día 23 -el Reino Unido votará tres días antes- al no prosperar a tiempo un acuerdo del brexit con los laboristas que hubiera permitido este mes la retirada del país, como confiaba la primera ministra británica, Theresa May. Al lanzar su programa, Corbyn, presionado en sus propias filas para que se comprometa a convocar otro plebiscito, aseguró que su formación respalda un pacto alternativo del brexit que garantice los empleos y la calidad de vida de la gente al tiempo que pidió poner fin al actual “caos” del Ejecutivo. “Nunca podremos aceptar un mal acuerdo del Gobierno o que no haya acuerdo, que sería desastroso. Así que si no podemos obtener un pacto sensato, en la línea de nuestro plan alternativo o unas elecciones generales, el Laborismo respalda la opción de un voto del pueblo”, reiteró el laborista sin comprometerse a apoyar ahora mismo una segunda consulta.

Corbyn insistió, además, en la importancia de transformar el país, atajar la injusticia, las desigualdades y la crisis del cambio climático y “unir -recalcó- a la gran mayoría de la gente”. Al referirse a estas divisiones, Corbyn aseguró que estas no residen entre los que prefieren el brexit y los que quieren seguir en el bloque europeo, sino que la “verdadera división” está entre “los muchos y los pocos”, entre un amplio sector de la población con pocos recursos y un reducido número de personas con altos ingresos.

“Parálisis política” “Mientras que la incompetencia del Gobierno y las divisiones sobre el brexit han creado esta parálisis, las injusticias en nuestra sociedad se profundizan”, agregó Corbyn, que calificó de “caótica” la negociación de May sobre el “divorcio” británico.

También cargó contra otras formaciones políticas al insistir en que “no están realmente comprometidas a plantarse ante los que evaden impuestos, los que contaminan o los jugadores financieros que hicieron estallar nuestra economía hace una década. El Laborista es el único partido con un plan para unir a nuestro país y hacer que funcione para muchos y no unos pocos”, dijo.

El Gobierno de Theresa May y el laborismo esperan reanudar la próxima semana las negociaciones sobre el brexit. En ese sentido, Corbyn criticó al Ejecutivo por no apartarse ni un ápice de sus líneas rojas (como el rechazo a una unión aduanera) al tiempo que admitió las dificultades de negociar con un “Gobierno que se está desintegrando”, en referencia a las divisiones internas.

Laboristas y conservadores sufrieron la semana pasada un duro varapalo en las elecciones locales celebradas en Inglaterra, donde los votantes se decantaron más por el proeuropeo Partido Liberal Demócrata, que exige la convocatoria de un segundo referéndum para desbloquear la parálisis del brexit.

En las filas del Partido Conservador de May, las grietas se profundizan por las crecientes voces que piden a la primera ministra que fije una fecha para su retirada del poder.

May ha prometido a sus diputados dimitir pero una vez que se materialice el brexit y confía, según los analistas, en que pueda conseguirlo antes del receso de verano de finales de julio.