pamplona - La crisis humanitaria del Open Arms ha supuesto para el Gobierno en funciones el enfrentamiento con todas las formaciones políticas. Sus posibles socios solicitaron ayer la comparecencia para explicar la gestión del caso del buque humanitario, que fue respaldado por ERC, el Grupo Mixto, PNV, PP y Ciudadanos. No así Vox, que votó en contra junto al PSOE. El jueves que viene se celebrará un pleno extraordinario en el que la vicepresidenta, Carmen Calvo, dará cuenta de los pasos dados.

Sin embargo, la petición de comparecencia del presidente en funciones, Pedro Sánchez, que habían formulado el PP y Ciudadanos, no salió adelante. Los 29 votos a favor se quedaron por debajo de los 35 que se registraron en contra de las explicaciones del líder socialista en un pleno extraordinario. Noelia Vera, de Unidos Podemos, lamentó que Calvo haya cometido una “falta muy grave” con las declaraciones que ha realizado durante la gestión de la crisis del Open Arms, que calificó de “tardía” y “torpe”. Vera criticó que la política migratoria del PSOE se haya convertido en una política “de gestos”. “Y lo digo con dolor” porque, según Vera, no se puede decir que se está preocupado por la protección de los migrantes cuando se está “desmantelando” Salvamento Marítimo y su trabajo “lo tiene que hacer un barco, al que se le está criminalizando”.

Ayer mismo, los 15 migrantes procedentes del Open Arms que España se comprometió a acoger inciaron su camino al puerto de Algeciras a bordo del buque de la armada Audaz desde el puerto de Pozallo, en Sicilia. La travesía puede durar entre dos o tres días, aunque su duración dependerá de las condiciones de navegación. Entre los 15 migrantes, entre los que no hay ningún menor, son adultos de cuatro nacionales de Eritrea; tres de Sudán; 3 de Gambia; 2 de Ghana; 1 de Nigeria; 1 de Liberia; y 1 de Etiopía.

nueva crisis La crisis migratoria continúa con nuevos rescates como el del barco alemán apoyado por la ONG Mission Lifeline, Eleonore, que salvó la vida de unos 110 migrantes este lunes frente a las costas de Libia. Como no podía ser de otra manera, el ministro del Interior, Matteo Salvini, prohibió ayer la entrada en aguas italianas del buque humanitario recordando que se enfrenta a una posible multa de un millón de euros.

Salvini ha firmado una orden con la que ha vetado la entrada, tránsito y abastecimiento en aguas italianas del Eleonore, en cumplimiento de una ley que él mismo impulsó y que, en caso de incumplimiento, conlleva la incautación del barco. Según consta en dicha orden, la ONG se anticipó a una actuación de la Guardia Costera libia al efectuar el rescate. El capitán, Claus-Peter Reisch, aseguró que el rescate se produjo “en el último segundo”, ya que la embarcación, una lancha hinchable, estaba ya hundiéndose. Esta decisión fue ratificada por los ministros de Defensa y de Infraestructuras y Transporte,

El Eleonore también recibió el rechazo de Malta, que rechazó ayer suministrar agua y alimentos al buque alemán y también les negó un puerto seguro para desembarcar. - D.N.

cinco muertos en un naufragio

Más de 65 rescatados Al menos cinco migrantes murieron ayer y en torno a una veintena más desaparecieron en el Mediterráneo al naufragar el bote neumático con el que pretendían alcanzar la costa de Europa desde Libia, informó a Efe un portavoz de la Guardia costera libia. Según su relato, otras 65 personas que navegaban sin rumbo a bordo de la misma embarcación fueron rescatas por las patrulleras locales. Los rescatados, la mayoría de ellos procedentes de Sudan, fueron trasladados a tierra, donde recibieron los primeros auxilios antes de ser trasladados a centros de detención en la zona, agregó la fuente sin ofrecer otros detalles.