pamplona - La Red de Personas Torturadas en Navarra entregó ayer sendas cartas en las sedes del Gobierno y el Parlamento en las que solicitan reunirse con los máximos representantes de estas instituciones, María Chivite y Unai Hualde, con el fin de que durante esta legislatura se impulse una investigación “científica, profesional e independiente sobre la tortura” en la Comunidad Foral.

En las misivas señalan que más de mil personas han sido torturadas en Navarra, que una de ellas fue asesinada -el cadáver de Mikel Zabalza apareció en el río Endarlatza tras ser detenido por la Guardia Civil a finales de 1985- y que España tiene cinco condenas del Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo por no investigar otras tantas denuncias de torturas. Entre ellas la de Oihan Ataun, detenido en 2008 y absuelto por los tribunales y que ayer leyó el comunicado en euskera de este colectivo. En castellano lo hizo Mariló Gorostiaga, que estuvo desde 1994 a 2013 en prisión tras ser condenapor pertenecer al comando Nafarroa de ETA.

“De manera oficial no se han querido escuchar una realidad dolorosa que todavía sigue oculta”, denunciaron Ataun y Gorostiaga, quienes consideran que “es imprescindible reconocer” que en Navarra la tortura ha sido una práctica generalizada desde tiempos de la dictadura”.

“Más de mil navarros y navarras hemos sido torturados de manera salvaje” y es “imprescindible” conocer la “cruda realidad” de un sistema que “las Fuerza de Seguridad del Estado han mantenido” con “la aceptación de la judicatura” mientras “las instituciones miraban para otro lado”, denunciaron Gorostiaga y Ataun.

“Le debemos a la sociedad, a las futuras generaciones, esclarecer lo ocurrido”, añadieron los miembros de la Red, que piden a Chivite y Hualde que hagan “cuanto esté en su mano” para llevar a cabo en esta legislatura la mencionada investigación, un asunto del que quieren hablar personalmente con ambos mandatarios.