Navarra emitirá este año al menos 331 millones de nueva deuda pública, que serán más si el Estado autoriza un aumento del límite de déficit. “Las graves consecuencias económicas y sociales sin precedentes producidas por el coronavirus han desencadenado un aumento del gasto y una reducción de los ingresos imprevista que es necesario financiar. En consecuencia, la estrategia de financiación inicialmente diseñada para 2020 se ha replanteado para acomodarse a esta nueva realidad”, afirma el último informe de la Hacienda Foral, que había previsto el ejercicio con un equilibrio de cuentas y una reducción del endeudamiento.El coste aproximado de la nueva deuda en intereses será de cuatro millones anuales, que habrá que sumar a los 65 millones presupuestados para este año. Esta cifra podría aumentar si se confirman las previsiones del Gobierno, que estima un déficit a final de año de 450 millones. Los intereses en cualquier caso seguirán por debajo del máximo histórico alcanzado en 2015, cuando Navarra llegó a pagar 108 millones por el coste de la deuda y los préstamos acumulados en años anteriores. Al cierre de 2019 el endeudamiento de Navarra era de 3.297 millones, un 4,3% menos que el año anterior. El equivalente al 15,7% del PIB, y casi tres puntos menos que el máximo alcanzado en 2017 (18,6%). En los dos últimos ejercicios se han amortizado 183 y 148 millones, respectivamente.
Intereses bajos
La pandemia sin embargo va a volver a girar la curva del endeudamiento hacia arriba. De momento, este año se van captar en el mercado financiero 649 millones. De ellos 318 millones para afrontar los vencimientos ordinarios y cancelaciones anticipadas, y el resto, 331 millones, para cubrir la caída de la recaudación, que en julio alcanzaba ya el 19%. Navarra y el Estado han pactado un déficit máximo del 2,3%, aunque con disposición a elevarlo al alza si la coyuntura no mejora. De hecho, la Airef, el órgano fiscal independiente, estima que la Comunidad Foral podría asumir este año un déficit de hasta un 3,9%, más de 800 millones. Un incremento que el Gobierno foral cree innecesario.
El escenario financiero en cualquier caso juega del lado de la Hacienda Foral, que cuenta a su favor con la política monetaria del BCE y con un calificación crediticia en la zona alta de la tabla (AA-). Algo que este año ha aprovechado para refinanciar operaciones por 268 millones a un interés fijo de entre el 1% y el 1,45%. De ellos 75 millones corresponden a una emisión en formato sostenible. En este contexto, Navarra va a priorizar emisiones a largo plazo (entre 10 y 20 años), en euro y a tipos fijos, para eliminar así riesgos futuros con el interés.
Más deuda. Tras el acuerdo alcanzado con el Ministerio de Hacienda, la solicitud de fondos va aumentar en 331 millones para cubrir el déficit autorizado.
Intereses. Al tipo medio de las últimas operaciones la nueva deuda tendrá un coste anual de unos cuatro millones en intereses.
Buena situación. Navarra se situó en 2019 entre las regiones menos endeudadas tras reducir su deuda en 148 millones. Supone el 15,7% del PIB, por debajo de la media nacional ( 23,7%).
En lo que va de año Hacienda ha formalizado operaciones de préstamos y deuda por importe de 268 millones. Las cuatro primeras en abril y la última en junio.
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