- Navarra está decidida a que los estímulos europeos para afrontar la crisis del coronavirus no solo sirvan para superar la contingencia sanitaria, sino para sentar las bases de la transformación que la Comunidad Foral del futuro necesita. Si el martes el vicepresidente José María Aierdi y los consejeros Itziar Gómez, Manu Ayerdi y Ana Ollo presentaron el programa Navarra Green -otra remesa de millones para inversiones con fondos de la UE-, la presidenta Chivite expuso ayer la totalidad de los programas en torno a tres ejes: innovación digital, green deal -el programa presentado el martes- y cohesión territorial. En total, 125 proyectos que consignan 3.419 millones de inversión para la próxima década, con cargo a fondos públicos -sobre todo los de la UE-, y que el Gobierno considera que movilizarían hasta cuatro veces más de actividad económica -el cálculo es de 13.000 millones-. Es un plan "muy ambicioso", en palabras de la propia Chivite, pero confeccionado con proyectos "factibles", "maduros" y "bien trabajados", porque Navarra "es una de las comunidades que mejor ejecuta los fondos europeos". No es algo menor, y la presidenta lo subrayó en más de una ocasión. Porque el 50% de los fondos europeos -los del Next Generation EU, la partida de 750.000 millones para los estados miembro- que lleguen a España los gestionarán las comunidades autónomas, bien pegadas a la línea del Estado, a la que también se quiere unir Navarra. De hecho, el horizonte temporal de estos proyectos es largo. "Queda por ver qué hace la Comisión Europea", confió Chivite, que calculó que el Estado puede tener listo el borrador con el que acudirá Europa a solicitar estas ayudas para finales de año.
Lo más importante es que el plan presentado ayer por Chivite tiene tres ejes. El primero, de estrategia de innovación digital, cuenta con 716 millones, aglutina ocho áreas de acción y 35 inversiones concretas. Ahí la ciencia de datos va a tener un peso específico, dijo Chivite, sobre todo en el ámbito de la salud. La segunda gran pata es la presentada el martes por el vicepresidente Aierdi, el Navarra-Nafarroa Green, con 770 millones y un horizonte de 3.500 hasta 2023. Y el último bloque es sobre cohesión territorial, 790 millones en los que se introducen, por ejemplo, obras importantes para el Gobierno como el Canal de Navarra.
En resumen, se trata de un documento vivo que depende de cómo se zanjen las ayudas de Europa, y de cómo quede el borrador del Estado, pendiente para diciembre. "Lo que está claro es que nos la jugamos porque necesitamos ser ágiles", reflexionó Chivite.
"Lo que está claro es que nos la jugamos, nos jugamos ser ágiles para ejecutar esos proyectos"
Presidenta del Gobierno de Navarra
