- El Gobierno español se ha mostrado en los últimos días más favorable que nunca a la concesión de indultos a los presos del 1-O. Aunque los ministros de Unidas Podemos siempre han defendido la medida de gracia para los condenados, ahora los socialistas se abren a tramitarla. Así se han expresado dirigentes como José Luis Ábalos o Carmen Calvo, a quienes ayer se les unió el propio presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, y el ministro de Sanidad, Salvador Illa.

Sin embargo, en la Generalitat desconfían de la voluntad que ha mostrado la Moncloa y piden a Sánchez que diga abiertamente si va a conceder el indulto a los reclusos soberanistas. Ayer, la portavoz del Govern, Meritxell Budó, expresó sus “dudas” respecto a la voluntad real del Ejecutivo español y le apremió a aclarar su postura. “Si hay esta voluntad, se puede tomar mañana mismo la decisión”, subrayó la consellera de la Presidencia, que reclamó que “se hable menos y se haga efectivo este indulto”.

Según Budó, Sánchez no ha propiciado este año “ningún avance” para acabar con la “represión” contra el independentismo, y denunció que sus “compromisos” con Catalunya han tenido “cero cumplimiento”. Con las elecciones del 14 de febrero en el horizonte, la consellera declaró que “no hace falta escuchar” a Sánchez para saber que “continúa la represión”.

Según Budó, “no hay ninguna diferencia” entre el Gobierno de Mariano Rajoy y el que preside Sánchez, porque “sigue habiendo presos políticos, exiliados y más represión que nunca”. Asimismo, la portavoz del Govern no cree que los indultos sean la solución y pide tramitar una ley de amnistía.

Aunque evitó pronunciarse sobre los indultos, Pedro Sánchez abogó ayer por “el reencuentro y la reconciliación” en Catalunya, dejando entrever una postura favorable a favor de ellos. El presidente del Gobierno subrayó que “es importante superar episodios aciagos que sonrojan” y reconoció que ante lo que ocurrió en Catalunya en el proceso soberanista “nadie está libre de culpa” y “todos hemos cometido errores”.

El Gobierno, añadió, “no ha escondido sus intenciones” y “apuesta claramente por el reencuentro, la reconciliación y la convivencia en Catalunya”. Por eso, abogó por “aprender” de los errores cometidos y mirar “hacia adelante” para encontrar un espacio de encuentro. Eso es, en su opinión, por lo que “van a apostar” los ciudadanos catalanes en las próximas elecciones autonómicas del 14 de febrero: “abogarán por superar esta etapa tan dramática que se ha vivido y apostarán por un futuro compartido”.

En favor de una política de “reencuentro” se mostró también el ministro de Sanidad y secretario de Organización del PSC, Salvador Illa, que aseguró que la tramitación de los indultos es “sabia” y el Gobierno tiene la “obligación” de realizarla. “Pemite dilucidar si es procedente conceder la medida de gracia”, resumió.

A su juicio, lo que toca ahora en Catalunya es “abrir un nuevo tiempo, cambiar la dinámica de estos años que no ha sido buena para nadie ni para quienes han protagonizado un proceso de secesión que ha dividido a la sociedad catalana” y que la ha “empobrecido. Nosotros estamos por una política de reencuentro”, insistió.

Así, reclamó buscar un “mínimo de cohesión” que todo el mundo pueda defender. “Debemos comprometernos a cumplir el marco de convivencia que nos hemos dado y, si queremos cambiarlo, ponernos de acuerdo en cómo hay que hacerlo y por el procedimiento que está previsto”.

Mientras tanto, en Génova ya ven claro que los indultos se materializarán el año que viene y no dudarán en llevar a los tribunales cualquier concesión a los presos independentistas. Así lo expresó ayer Pablo Casado, que cree que Sánchez hará lo que “le convenga” con los indultos porque “busca un nuevo tripartido” de izquierda en Catalunya.

El presidente del PP explicó que Sánchez “ha pactado con quien ha querido y está cómodo en el extremismo y la radicalidad. Si eso le cuesta los indultos, en contra del Tribunal Supremo y del Tribunal Constitucional, donde habrá que acudir, y en contra de lo que dice la propia Ley de Indultos, que plantea que tiene que haber arrepentimiento en vez de decir lo volveremos a hacer; y que tiene que haber un informe preceptivo del tribunal sentenciador, pues le va a dar igual. Hará lo que quiera”.

Casado recordó que estos días ha escuchado a Illa y Abalos decir que no pactarán con los independentistas y añadió que le “daba la risa” porque “es lo mismo que decían después de las elecciones” generales de noviembre. “No se les cae la cara de vergüenza. Son las mismas mentiras”, enfatizó, antes de pedir un “poco de respeto a la inteligencia” de los españoles.

Por último, la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, cargó contra Sánchez por querer “indultar y perdonar a cuatro o cinco políticos que han cometido errores gravísimos” en vez de dar “ayudas directas a las familias” de españoles que sufren las consecuencias de la pandemia.