- Navarra tiene pendiente negociar el año base del nuevo quinquenio (2020-2024) del Convenio Económico, pero las circunstancias generales no se lo están poniendo fácil. El lunes, Geroa Bai urgió al Gobierno a iniciar ya las conversaciones para actualizar la cifra que cada año paga Navarra al Estado en virtud de las competencias no transferidas. Al margen de porque ya toque -la actualización acumula un año de retraso-, porque este año las grandes operaciones de deuda que está suscribiendo el Estado para hacer frente a la pandemia afectarán a la Comunidad Foral, que se ve obligada a destinar una buena parte -un 30% del total- del Convenio a pagar intereses de una deuda estatal que propiamente no contribuye a engordar Navarra.

Pero de las palabras de la consejera de Hacienda, Elma Saiz, se deduce que tardarán en arrancar. “La dilación siempre es algo habitual, me remonto a la última negociación, la de 2015”, justificó Saiz, que concedió que este es “un tema que está encima de la mesa y que abordaremos, a poder ser, con la menor dilación posible”.

Con respecto a la reunión técnica que hoy mantienen Navarra y el Estado para evitar un recurso de inconstitucionalidad sobre un decreto foral relativo a funcionarios, Remírez es optimista y cree que se llegará a un acuerdo satisfactorio con el Gobierno central sin recurrir a los tribunales.

La colaboración “se valora”. El proyecto de la Macrorregión Atlántica, en el que participan todas las comunidades autónomas del Estado con ventana al Atlántico y en la que también quiere estar Navarra, podría mejorar la recepción de fondos europeos. “La colaboración entre comunidades es una cosa que se valora”, aseguró Remírez. Por su parte, la consejera Saiz dijo que es “interesante” este tipo de colaboración, pero recordó que la gestión de los fondos Next Generation -los de recuperación de la UE- corre a cargo del Gobierno central, en la medida en la que es un “plan nacional”.