- El juicio a Luis Bárcenas por la caja B del PP se reanuda hoy con su declaración como acusado, cuyo contenido ya ha ido anticipando con sus revelaciones en otras causas que afectan al PP (Púnica y Kitchen) y en la carta que remitió a la Fiscalía Anticorrupción ofreciéndose a colaborar con la Justicia.

Una carta que hizo de prólogo de este juicio y en la que manifestaba que el expresidente Mariano Rajoy era conocedor de la caja B porque en su despacho le comentó que trituró en una “máquina destructora” de papeles toda la documentación que lo acreditaba, sin saber que él conservaba una copia de esa contabilidad, sus famosos papeles.

El extesorero del PP también señaló a Rajoy -llamado a declarar como testigo- como uno de los receptores de sobresueldos mensuales en el partido extraídos de la caja B.

Al inicio del juicio, el abogado de Bárcenas, Gustavo Galán, planteó celebrar un careo entre el extesorero y Rajoy si se apreciaban contradicciones en sus declaraciones sobre la caja b cuando testifique el expresidente. Esta propuesta le pareció al PP, considerado responsable civil como partícipe a título lucrativo en esta causa, una manera de seguir contribuyendo al “circo mediático”.

Así lo expuso en las cuestiones previas el abogado del partido Jesús Santos, que acabó él mismo en el foco mediático al trascender que había tenido contacto con un empresario enviado por Bárcenas.

El encuentro se produjo, según él mismo admitió, con la intermediación del ahora consejero madrileño de Justicia, Enrique López, cuando éste era magistrado en la Audiencia Nacional.

Bárcenas cumple condena por el caso Gürtel y en esta causa se enfrenta a una petición de Anticorrupción de 5 años de cárcel por un delito fiscal, otro de falsedad documental y un tercero de apropiación indebida, en relación, sobre todo con el pago con dinero de la caja B de casi un millón de euros de la reforma de la sede del PP en la calle Génova.