El extesorero del PP Luis Bárcenas expuso ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz que si bien las donaciones que hacían al partido ciertos empresarios no tenían el carácter finalista de obtener una adjudicación pública, sí que se hacían a cambio de lograr una reunión con un ministro.

"En ese mundo conseguir que te reciba un ministro no es sencillo" y "eso yo creo que valía dinero y estaban dispuestos los empresarios a abonarnos dinero a cambio de esa contraprestación", indicó Bárcenas a preguntas de la abogada del Estado en su declaración como imputado el pasado 16 de julio, y a cuya grabación ha tenido acceso Efe.

Una contraprestación que él entiende que era "sana" porque "temas finalistas prácticamente no ha habido", aseguró en la que ha sido su última comparecencia en esta pieza de los papeles de Bárcenas, cuya instrucción ha rechazado prorrogar el juez tras oírle de nuevo a raíz de sus últimas revelaciones, porque el jueves se dará por cerrada esta investigación.

"Aunque no fuera nuestro pensamiento, eso vale dinero en cualquier sitio, el tener las puertas abiertas y la posibilidad de acceso, pero simplemente por poderte sentar una hora con el máximo responsable de un proyecto y conocer los proyectos que tiene ese ministerio, los plazos en los que van licitando obras...", consideró.

Ese es el máximo fin que, según Bárcenas, tenían esas donaciones, si bien tampoco descartó que otras tuvieran por objeto otro tipo de beneficio como aportaciones para campañas electorales, que se financiaban, aseguró, "con fondos específicos que algunos empresarios entregaban para ese fin".

Sin embargo, reconoció que no tenía los datos con los que podría probarlo porque para ello necesitaría la documentación que le sustrajo el policía Andrés Gómez Gordo, asesor de la exsecretaria del PP Maria Dolores de Cospedal, en el marco de la operación Kitchen.

"El concepto de los gastos que incluía esa documentación -añadió- eran gastos electorales, de mailing, de imprenta, una serie de conceptos que en aquella época no estaban financiados por la ley electoral y tenían un coste muy elevado y requerían fondos adicionales".

Sostuvo que en esa documentación está reflejado "quién dio el dinero, la cantidad que dio y a qué se aplicaron esos fondos. Eso no se lleva en los papeles que se juzgaron y están pendiente de sentencia", especificó.

En cuanto a los contactos con ministros, explicó que el anterior tesorero Álvaro Lapuerta, y él mismo en alguna ocasión "por delegación", actuaban como intermediarios.

Tras recibir al empresario donante, y a petición de éste, el tesorero se dirigía a los que fueron ministros de Fomento o Medio Ambiente bajo los gobiernos del PP desde 96 hasta 2004 y los secretarios de Estado en su caso.

A este respecto, Bárcenas recordó que el exministro de Fomento Francisco Álvarez Casos le llegó a recriminar a Lapuerta que llamase a un director general y no a él, y le prohibió que se dirigiese a cualquier persona que dependiese de él.

El extesorero también quiso dejar claro que ACS nunca fue donante del partido y recordó que esa fue la afirmación que hizo el cabecilla de Gürtel, Francisco Correa, en el macrojuicio a la trama y que motivó la reapertura de esta investigación en 2017.

En cuanto a OHL, señaló que su expresidente Juan Miguel Villar Mir tenía una "relación privilegiada" con Lapuerta porque eran íntimos amigos, con lo que no tenía que recurrir a ello.

En esta comparecencia, Bárcenas aceptó contestar todas las preguntas, salvo cuando le llegó el turno al abogado del PP Jesús Santos. "Yo al Partido Popular no le voy a contestar", manifestó.