Bilbao - La luz del Tren de Alta Velocidad (TAV) en Bilbao se ve un poco más cerca en su largo túnel. El Ministerio de Fomento publicó ayer en el Boletín Oficial del Estado el estudio informativo del corredor de acceso y la estación soterrada de Abando, el documento indispensable para licitar las obras, poder ejecutarlas a continuación y terminarlas para 2023, tal y como acordaron en octubre pasado el Gobierno de Sánchez y el de Urkullu. Unos trabajos que serán complejos y que, según el estudio, finalmente saldrán a licitación en conjunto por 767,13 millones de euros, casi 40 millones más que los 728 anunciados hace un año cuando aún presidía el Gobierno español Mariano Rajoy.

Fuentes del departamento vasco de Desarrollo Económico e Infraestructuras mostraron ayer su satisfacción por la publicación del estudio, ya que “pone en valor el compromiso alcanzado por la consejera Arantxa Tapia con el ministro de Fomento, José Luis Ábalos, para que la alta velocidad en Euskadi sea una realidad en 2023”. El plazo para plantear cualquier cuestión al proyecto en global o cualquier otro aspecto, también medioambiental, es de treinta días hábiles a partir de hoy.

El empeño desde Madrid parece firme porque ya ha iniciado también los trámites a nivel europeo para adelantar lo máximo posible la licitación de los trabajos. De hecho el Diario Oficial de la Unión Europea ya publicó hace unos días los anuncios de información previa correspondientes a los proyectos constructivos tanto de la estación de Bilbao como de la de Gasteiz. En ambos casos, el plazo de ejecución es de 24 meses con un coste para Bilbao de 3,5 millones de euros mientras que el de Gasteiz se quedará en tres. De esta forma, en cuanto se tramiten las alegaciones que se presenten en el próximo mes al estudio informativo se podrá sacar a concurso los trabajos poco tiempo después.

Sobre el coste económico de las obras, el estudio informativo desglosa la construcción del túnel desde Arrigorriaga a Bilbao en 257,47 millones, mientras que la propia estación supondrá 495,73 millones. A estos dos montantes hay que sumarle 13,37 millones más correspondientes al traslado de las instalaciones ferroviarias a la planta técnica, la denominada -1,5. Se generará en la estación entre el nivel -1, donde pararán en ocho andenes todos los trenes de cercanías de Renfe, incluidos los que lleguen desde Balmaseda, y la planta -2, por debajo, donde operarán los trenes de alta velocidad y los intercitys.

El estudio informativo también se decanta por acometer la alternativa 1 para el largo túnel de más de seis kilómetros que unirá el punto de Arrigorriaga donde ahora muere el trazado de la Y vasca con el emboquille que se construirá para que el TAV entre a la estación soterrada.

El informe reconoce que ambos recorridos “son viables” pero se ha elegido el trazado que entra a la ciudad un poco más pegado al barrio de La Peña y evita el paso por debajo de las minas de Miribilla “atendiendo a criterios medioambientales, funcionales, económicos y territoriales”, indica el estudio.

En esta opción también se ha incluido acondicionar las instalaciones de mantenimiento en la estación, la referida planta -1,5, en lugar de habilitar un espacio nuevo en terrenos que Adif tiene en Zorrotza, otra de las alternativas estudiadas.

Descartada la gran tuneladora El documento también desvela que la excavación de la nueva galería no se ejecutará con una gran tuneladora como siempre se había supuesto. Este tipo de máquinas todo en uno, que extraen la tierra y van habilitando el túnel según avanzan, se ha desestimado “debido a condicionantes económicos o de espacio requerido para instalaciones, como pudiera ser la ejecución con tuneladora o túnel entre pantallas”, concreta el informe.

El método elegido será el utilizado para construir el metro en Bilbao o los túneles de la Supersur, el denominado Nuevo Método Austriaco (NATM). Consiste en ir creando la galería poco a poco mediante una maquina rozadora, o por voladuras, para después sostener las paredes creadas incrustando en el terreno una especie de grandes tornillos o bulones y proyectando encima hormigón que asegure todo el conjunto.

El prolongado túnel contará hasta con seis salidas de urgencia para viajeros en caso de que ocurra algún incidente en su interior, cinco a lo largo del recorrido y una sexta en la propia estación de Abando. Además se construirán otras dos galerías de emergencia que podrán ser utilizadas por vehículos de socorro. El desarrollo del túnel también ha previsto la futura conexión del tren de alta velocidad con Santander, tanto para los convoyes que circulen de paso como para ofertar servicios punto a punto entre la capital cántabra y la vizcaina.

En cuanto a la estación, el estudio informativo indica que su estacionamiento no estará pegado a la calle Hurtado de Amezaga, como se ve en la infografía superior, sino que se ubicara al lado de la calle Bailén, desde la que tendrá acceso directo. Contará con cuatro niveles soterrados sobre una planta de más de 5.500 metros cuadrados. En el proyecto también se incluye la cubierta de la trinchera entre las calles Zabala y Juan de Garai, vías arriba del puente Cantalojas.

2023