Lista de espera a cero en trasplante hepático. El coordinador de trasplantes de Navarra, José Roldán, que tuvo un recuerdo emocionado para su antecesor en el cargo, José Elizalde, destacó que “el aumento de los trasplantes entre los años 2013 y 2016 consiguió reducir a más de la mitad la lista de espera, que es como nos encontramos en estos momentos”. Asimismo, señaló que en la lista de espera de trasplante hepático “a día de hoy no tenemos ningún paciente” e hizo hincapié en que “el último trasplante de hígado que se hizo hace unos días en la Clínica Universidad de Navarra tan sólo ha estado 7 días esperando”.

El 25% de donantes de órganos, de asistolia. Tras destacar los buenos resultados obtenidos tras la puesta en marcha en 2014 del programa de donación en asistolia controlada o tipo III -que son aquellos pacientes que fallecen por criterios circulatorios o cardíacos generalmente en una UCI-, que “a día de hoy supone más del 25% de nuestros donantes en Navarra”, Roldán señaló que están trabajando para ver cómo incorporar el programa de donación en asistolia no controlada o tipo II -de pacientes que mueren tras sufrir una parada cardíaca extrahospitalaria-.

45/50

La edad media de los donantes de sangre en Navarra es de 45 años, si bien en aféresis se eleva hasta los 50 años. El número de personas registradas como donantes de sangre es de 32.738. Salud señala que la proporción de esas personas según tramos de edad indica que pertenecen en mayor medida a edades avanzadas, por lo que “se hace necesario planificar recambios generacionales si se quiere cubrir las necesidades futuras”.

pamplona - “Aunque tenemos una base de donantes muy buena, posiblemente somos la comunidad con mayor número de donantes registrados, más del 7,55% de la población en edad de donar está registrado y no excluido como donante de sangre, el reto que nos plantea es que en los próximos once años el 41,8% de los donantes actuales habrá cumplido 65 años y el 35,7%, 70 años. En la actualidad, en Europa se permite donar hasta los 65 años y podemos ir prolongando año a año -hasta los 70 años, en el Estado-. Por ello, o cambiamos el criterio y dejamos donar hasta los 80 años, si bien muchos no estamos de acuerdo, o intentamos animar a la población más joven”. De este modo, el director del Banco de Sangre y Tejidos de Navarra, José Antonio García Erce, expresaba ayer la necesidad de promover la regeneración y que “nuestra población joven, que es muy solidaria, participa en muchos proyectos, dé el salto a ser tan constante a la hora de la donación”.

En esta línea, sostuvo que “necesitamos que nuestro colectivo joven no solamente done sangre, sino que considere la posibilidad de ser donante de médula ósea”. García Erce participó, junto al consejero de Salud en funciones, Fernando Domínguez, el director del servicio de Ciudadanía Sanitaria, Lázaro Elizalde, el coordinador autonómico de trasplantes, José Roldán, y los presidentes de ALCER y Adona, Manuel Arellano y Javier Álvarez, respectivamente, en la presentación de una nueva campaña que el departamento de Salud, junto con asociaciones de donantes y de pacientes, así como personas receptoras, va a lanzar el próximo lunes para sensibilizar y concienciar a la sociedad sobre la importancia de las donaciones de órganos, sangre y tejidos, además de para involucrar a nuevas generaciones de potenciales donantes de sangre y de médula ósea.

48.000 euros Como destacó Domínguez, para el diseño y desarrollo de esta campaña, que lleva como lema Bizitza ematen didazu! Mila esker, emaile-¡Me das la vida! Gracias, donante, “el Gobierno de Navarra ha contado con la colaboración activa de las asociaciones de donantes a través de la Comisión Consultiva sobre Donaciones de Navarra”. Cuenta con un presupuesto de 48.000 euros y se desarrollará durante las dos próximas semanas “mediante inserciones publicitarias en prensa escrita, radio, cine, marquesinas y redes sociales”.

Para ello, se han editado seis vídeos en los que cinco personas que han recibido un trasplante de órganos, de tejidos o transfusiones de sangre trasladan “su agradecimiento a las y los donantes por este acto altruista y solidario”, explicó el consejero. Un material que se puede consultar en la web https://donantes.navarra.es/es/, donde también ofrecen información de las distintas entidades, y que es accesible desde un código QR inserto en la cartelería, y en youtube.

Para la realización de esta iniciativa se ha contado con la colaboración de la Asociación de Donantes de Sangre de Navarra (Adona); la Asociación Eduardo Domezáin de Donantes de Médula de Navarra (Domena); la Asociación para la Lucha Contra las Enfermedades Renales (ALCER) de Navarra; la Asociación Navarra contra la Fibrosis Quística; y la Asociación de Trasplantados y Enfermos Hepáticos de Navarra (Atehna).

En su intervención, José Antonio García Erce incidió en la importancia y necesidad de garantizar el relevo de las personas que donan sangre. Advirtió de que en los últimos años “estamos viendo una estabilidad y una tendencia lenta al descenso en la donación” de sangre en la Comunidad Foral, donde actualmente hay 32.738 personas registradas como donantes, de las que 18.384 son hombres y 14.354 mujeres, si bien “nuestra población donante es veterana. La edad media es de 45 años. En aféresis, de 50 años, y el grupo que más dona son los que tienen entre 50 y 55 años”. Por ello, sostuvo que “tenemos una necesidad de promover la regeneración”. Asimismo, consideró un reto “incrementar la donación de aféresis para tener productos especiales” y se marcó como meta este año alcanzar las 2.000 donaciones de este tipo.

Además, apuntó que hay 13.714 donantes de médula ósea en activo, habiéndose registrado el año pasado 399 nuevos, por lo que Navarra tiene “la tasa más alta de donantes por habitante”, y que “también está aumentando la donación” de tejidos.

Por otro lado, el coordinador autonómico de trasplantes, José Roldán, afirmó que Navarra es “una de las comunidades con mayor tasa de donación -41 donantes en 2018 y 20 en lo que llevamos de año-, lo que conlleva que tengamos una importante actividad trasplantadora -65 el año pasado y 26 en 2019- ”. No obstante, “no se trata solo de cantidad sino de calidad y también somos punteros en ese aspecto”, porque “la tasa de donantes no efectivos es muy pequeña”.

Trasplantado de riñón hace 2 años, relata que antes pensaba que “las enfermedades siempre les pasan a otros”. Hoy reconoce que “nunca podremos estar lo suficientemente agradecidos”.

A Celia le trasplantaron un hígado hace 9 años; una operación que le “ha dado la vida. Muchas veces lo he pensado, es que no sé cómo se lo agradecería. Es que no sé... es una cosa tan, tan grande”.

Con 24 años, le hicieron un trasplante de médula ósea y necesitó “más de 200 tranfusiones”. Señala que “los donantes de sangre y de médula no sólo salvan al paciente, sino a toda su familia”.

Esta vecina de Irurita recuerda que cuando nació su hija Saioa “el parto fue bien, pero cuando llegamos a la habitación perdí muchísima sangre. Me transfundieron tres bolsas de sangre”.

Trasplantado bipulmonar hace 18 años, su sueño de infancia era “respirar como una persona normal”. Así, para este “disfrutador de montañas”, como él se define, “la donación es una cadena de vida”.