navarra - El abandono y el maltrato de animales crece en los últimos años. En España, uno de los países con las mayores tasas dentro de la Unión Europea, ha registrado un significativo incremento desde 2007, cuando se abandonaron 3.920 perros y 147 gatos, llegando al 2018 con un total de 104.688 y 33.719 respectivamente. La Fundación Affinity, que se encarga de realizar desde hace 20 años un estudio anual con la colaboración de otras protectoras, destacan que los motivos son, principalmente, las camadas no deseadas (15,3%) y el fin de la temporada de caza que llegó a alcanzar un 13% el año pasado.

En lo que concierne a Navarra, la memoria realizada en 2018 conjuntamente por las protectoras de animales señalaba que fueron más de 850 perros los que aparecieron desatendidos en la Comunidad Foral, de los cuales aproximadamente el 52% correspondía a razas de caza o de trabajo (pastoreo, guarda).

En el caso de los gatos, éstos rondaron casi los 900 gatos recogidos por las protectoras junto a los servicios de lazareto municipal. El 72% de los perros rescatados fueron adoptados en un plazo breve de tiempo; en el caso de los gatos, representaban el 68%. El porcentaje restante permaneció en refugios de titularidad municipal, en casas de acogida o en el Centro de Protección Animal de Etxauri.

El verano es un factor determinante a la hora de renunciar a las responsabilidades que supone tener un animal. Son las protectoras las que están más al tanto de la situación ya que es durante la época estival cuando reciben más animales desatendidos por sus dueños: “La semana pasada encontramos una perra de raza setter en bastante mal estado. Se veía que estaba abandonada”, relata Ramón Castro, encargado de la Protectora de Mutilva.

Hay casos en los que son atados a las puertas de las protectoras o directamente los dejan en gasolineras, carreteras o áreas de servicio donde el animal no va a poder seguirlos: “Las plazas de abandono son parecidas durante todo el año pero sí que es verdad que este verano se han incrementado mucho más. La época estival es un momento en el que la gente se va de vacaciones y se desentiende de sus mascotas. Llevo 4 años aquí y nunca lo había notado tanto. A lo largo del 2019, he visto situaciones de abandono que, en muchos casos, se han producido porque cogieron al perro o gato en Navidades y después les ha acabado estorbado. Estamos saturados”, relata Yadira Díaz, miembro de las Txikas de Etxauri (voluntarias en la perrera del Gobierno de Navarra).

Maltrato animal

Vigente en 2019

El maltrato animal continúa siendo una escalofriante realidad a día de hoy. Tan solo en el 2018 se llegaron a registrar más de 50 casos en toda Navarra, entre los que se incluían sobre todo camadas abandonadas, animales apaleados o quemados nada más nacer o encontrados con algún disparo.

Este es el caso de Olivia, una perra mestiza de sabueso, encontrada este año en el campo con un disparo en la cara: “Empezamos a hacer pruebas y vimos que era un perdigonazo de caza menor. Le faltaba la oreja y tenía restos del perdigón en su cara. Además, no podía abrir la mandíbula. Resulta que tenía anquilosis y por ello, estaba tan delgada. Con terapias de radiofrecuencia y antiinflamatorios conseguimos que abriera la boca. Además, la veterinaria le hizo distintas pruebas y vio que estaba sorda de nacimiento. Actualmente, no tiene secuelas y está a la espera de que una familia la adopte”, explica Ana González, trabajadora de la Protectora de animales de la Ribera.

Esta misma protectora también vivió una situación similar en 2018 cuando halló a una mastina española, Liberty, con una herida infectada por gusanos: “No sabemos cómo le ocurrió porque nos la encontramos así. Tenía más heridas pero no pudimos demostrarlo. Después, salió adoptada y ahora no tiene secuelas”, apunta Ana González. Fatídicos sucesos como éstos son, muchas de las veces, derivados a las autoridades competentes como los Ayuntamientos, SEPRONA (Servicio de Protección de la Naturaleza), uno de los departamentos de la Guardia Civil o Policía Foral. Desde enero de 2019, el SEPRONA ha registrado 2 casos de abandono y maltrato animal y actualmente, investiga el caso de un perro que fue enterrado con vida y la PADRONA (Patrulla de Protección de la Naturaleza) de la Guardia Civil de Castejón el hallazgo de un perro quemado en un contenedor.

cómo ayudar

Formas

Existen muchas maneras de colaborar y prestar ayuda al mundo animal. En la lista de prioridades, ofrecerles un hogar siempre se encuentra entre las más necesarias.

Sin embargo, existen muchas familias que no pueden adoptar y por ello, optan por donar pienso, latas, correas o arneses. Asimismo, cabe la posibilidad de apadrinar o amadrinar a un animal a partir de 5 euros al mes o hacerse teamer, es decir, con tan solo 1 euro al mes muchas protectoras consiguen salir a flote al cabo del año. Lo único que hay que hacer es darse de alta mediante una dirección de correo electrónico y dejando constancia del número de cuenta bancaria para poder pagar directamente.

Es un proceso simple donde no hay gastos ni ninguna comisión extra. En el momento en el que la persona decida darse de baja, lo tiene que hacer a través de la página sin pagar nada más. Protectoras como Egapeludos, las Txikas de Etxauri, la de Mutilva o Santuario Corazón Verde (dedicados especialmente a animales de granja abandonados y maltratados) cuentan con el servicio teaming: “Existen muchas formas de ayudar como ocurre con el teaming. Gracias a ello, podemos costear todo. Además, cada especie necesita unos cuidados diferentes lo que supone un gasto mayor”, apunta Josetxo Segarra, fundador de Santuario Corazón Verde.

AVANCE

Nueva Ley Foral

El 4 de abril de este año entró en vigor la Ley Foral 19/2019 de protección de los animales de compañía gracias a la aprobación de Geroa Bai, EH Bildu, Podemos, IE y PSN mientras que UPN y PP se abstuvieron en la votación.

Con este nuevo decreto, se asegura la mejora de las condiciones de los animales de compañía en Navarra así como la garantía de que se combatirá el maltrato y abandono animal. Gracias a la nueva ley, “se garantizará la suficiencia financiera que permita desarrollar y ejecutar las obligaciones que esta ley adjudica a a las entidades locales y al Gobierno de Navarra”.