Jornada complicada. El Aeropuerto de El Prat vivió ayer una jornada complicada, con retrasos generalizados y decenas de cancelaciones a causa de la huelga del personal de tierra de Iberia, una situación agravada por las fuertes lluvias registradas en Barcelona, que han obligado a cerrar temporalmente las pistas. Un total de 32 vuelos tuvieron que ser cancelados. Las condiciones climatológicas también causaron el desvío de cinco aviones que debían aterrizar en Barcelona, entre ellos un Easyjet procedente de Basilea (Suiza) que se redirigió a Girona. Foto: Efe