PAMPLONA - Agentes de Policía Foral adscritos a la comisaría de Estella han investigado recientemente a un ganadero de una localidad de Tierra Estella como presunto autor de sendos delitos de falso testimonio y estafa.

Los hechos sucedieron cuando el ganadero denunció que alguien había accedido a su explotación y se había llevado 21 corderos valorados en más de 1.400 euros. Una patrulla de la comisaría de Policía Foral en Estella acudió al lugar para realizar una inspección ocular y entrevistarse con el denunciante. Según su versión, los ladrones habrían accedido por una de las puertas de la granja. Los policías observaron que ese acceso no contaba con ninguna cerradura o elemento de seguridad, algo que el ganadero reconoció abiertamente.

Dos días después, tras comprobar que su póliza de seguros únicamente se haría cargo de la indemnización si se trataba de un robo, el ganadero amplió la denuncia interpuesta. En esta ocasión, afirmó haber encontrado el candado que cerraba la puerta el día de la sustracción de los animales, con claros síntomas de haber sido forzado. Aseguró que ni él ni los agentes que realizaron la primera inspección se habían percatado de su presencia.

Una vez ampliada la denuncia, el ganadero logró que su aseguradora le indemnizara con más de 1.300 euros, pero la investigación detectó contradicciones en la versión del denunciante, lo que unido al análisis del candado y a la inspección ocular técnico policial permitieron conocer que el denunciante presuntamente había mentido de forma deliberada para cobrar del seguro. - D.N.