brasilia - El Amazonas sigue ardiendo con miles de focos activos ante la preocupación mundial por el desastre en el pulmón del planeta. Veinte días después de que el fuego se descontrolase, las fuerzas armadas brasileñas comenzaron ayer a colaborar en la extinción de los incendios que destruyen parte de la Amazonía. Estas ya actúan en ocho de los nueve estados amazónicos que han solicitado la ayuda al presidente Jair Bolsonaro. A pesar de la lucha de las ONG mundiales, desde Brasil insistieron ayer en que la situación generada por el fuego en la Amazonía ha sido “exagerada” por “cuestiones políticas” y en que los incendios no están “fuera de control” ni son los peores registrados históricamente en una zona que “cada año” se enfrenta a las llamas.

Amapá se sumó a las gobiernos regionales de Acre, Amazonas, Mato Grosso, Pará, Rondonia, Roraima y Tocantins y solicitó refuerzos militares para combatir los incendios forestales de este año en la Amazonía, los de mayor número en los últimos siete años. El único estado amazónico que hasta ahora no ha solicitado ayuda al Gobierno presidido por el líder ultraderechista es el de Maranhao, cuyo gobernador, Flavio Dino, un militante del Partido Comunista do Brasil (PCdoB), es uno de los mayores opositores a Bolsonaro.

Pese a las críticas por la flexibilización de las políticas ambientales, lo que ha contribuido para agravar la deforestación, así como por la demora en responder a los incendios, el Gobierno de Bolsonaro garantizó que la situación está bajo control y que las reacciones fueron “exageradas por intereses políticos”. De acuerdo con fuentes oficiales consultadas por Efe, uno de los motivos políticos que ha llevado a algunos países ha “exagerar” la repercusión de los actuales incendios forestales en la Amazonía es la resistencia de algunos miembros de la Unión Europea al acuerdo de libre comercio con el Mercosur.

Brasil alega que los incendios forestales ocurren todo los años y que agosto y septiembre son “críticos” por la sequía que afecta a la Amazonía en esos meses. De hecho, aún cuando son los más extensos de los últimos siete años, de acuerdo a datos oficiales, los incendios que consumen parte de la Amazonía no tienen la magnitud de los ocurridos hasta 2004, desde cuando están en caída tanto esos siniestros como la deforestación en la región.

Unos 200 sindicalistas brasileños protestaron ayer en Sao Paulo contra los incendios que destruyen parte de la Amazonía y contra la política ambiental del presidente del país, Jair Bolsonaro, al que acusaron de no actuar ante la deforestación de la mayor selva tropical del mundo.

La manifestación, convocada por la Fuerza Sindical, segunda central obrera en importancia de Brasil, reunió a decenas de dirigentes sindicales a las puertas de la industria metalúrgica MWM, un fabricante multinacional de motores de automóviles que tiene su planta en la zona sur de Sao Paulo, la mayor ciudad del país. En el acto se denunciaron una serie de hechos en los que el Gobierno de Bolsonaro se ha mostrado “omiso” ante el aumento de los incendios forestales en la Amazonía y que han contribuido al agravamiento de la situación.

También alrededor de 500 personas se manifestaron ayer frente a embajada de Brasil en la capital belga para denunciar esta situación. Con mensajes de Dejen de quemar el Amazonas o Prende fuego al capitalismo, los asistentes al acto denunciaron la política ambiental del presidente brasileño, Jair Bolsonaro, quien, según ellos, alienta indirectamente a los agricultores a cometer actos ilegales como la decisión de realizar un día de quema. - Efe

Bolivia acepta toda ayuda. El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró que su Gobierno está abierto a cualquier cooperación internacional para apagar el incendio en la Chiquitania, en la Amazonía boliviana, y anunció la suspensión de la campaña electoral de su partido para las elecciones generales de octubre.

Canadá ofrece su ayuda. Canadá ha ofrecido el envío de aviones cisterna y 15 millones de dólares canadienses (11,25 millones de dólares estadounidenses) para combatir los fuegos.

Israel manda un avión. Brasil ha aceptado el envío por parte de Israel de una aeronave que prestará “apoyo especializado” a los trabajos de las Fuerzas Armadas de Brasil en el combate a los vastos incendios.

DiCaprio abre un fondo. La fundación por el medio ambiente de Leonardo DiCaprio ha prometido donar 4,5 millones de euros para preservar el Amazonas.