MADRID. Tras el paso de la borrasca Gloria, que ha dejado un balance de 13 fallecidos y numerosos daños materiales en distintos puntos del país, las fuertes lluvias y tormentas se han detenido este sábado en Granada y Málaga, con una estampa, en esta última provincia, de coches amontonados y subidos a las aceras.

Precisamente estas dos provincias han amanecido hoy en alerta naranja por riesgo importante de lluvias, además de en alerta amarilla -de menor intensidad- por riesgo de tormentas, unos avisos que se prolongarán hasta las 18 y 20:00 horas, respectivamente.

La peor parte se la ha llevado Málaga; en concreto Campanillas, distrito de la capital. Allí, los vecinos se han encontrado coches amontonados y subidos a las aceras, y han visto como uno de ellos ha llegado a irrumpir totalmente en una sucursal bancaria arrastrado por la fuerza del agua tras las potentes lluvias.

Operarios y vecinos se afanan en las tareas de limpieza tras el desastre y aseguran estar impactados por lo sucedido, que califican de "tsunami".

En esta misma zona, el río Campanillas se ha desbordado, lo que ha provocado que se efectúen rescates en viviendas. Las autoridades están hoy pendientes, asimismo, de la Presa de Casasola en Almogía, "muy al límite", pero funcionando bien.

Además de Campanillas, se han visto afectadas por las fuertes lluvias las comarcas de Sol y Guadalhorce, donde la previsión era, según datos de la Aemet, que la precipitación acumulada en doce horas fuera de hasta 80 litros por metro cuadrado.

El mal tiempo, que también ha dejado en alerta naranja por lluvias a la comarca de Axarquía, ha ocasionado que el servicio de emergencias 112 Andalucía haya tenido que gestionar en la provincia más de 230 incidencias durante la madrugada del sábado, que han obligado, asimismo, a activar el Plan de Emergencias ante el riesgo de inundaciones en situación 1.

La mayoría de estos sucesos atendidos se han debido a balsas de agua, viviendas y carreteras anegadas, vías con acumulación de agua y conductores que se han visto sorprendidos por las lluvias. Y es que hasta las 11:30 horas se han acumulado en Málaga algo más de 77 litros por metro cuadrado.

En Granada, los puntos en alerta naranja han estado en la costa, donde la precipitación acumulada esperada era de 30 litros por metro cuadrado.

Desde sus cuentas de Twitter algunos políticos andaluces se han referido a este temporal. El presidente de la Junta, Juanma Moreno, ha pedido "prudencia" ante las intensas lluvias de Málaga y ha agradecido "la coordinación y la entrega de los servicios de emergencia para actuar con celeridad".

Moreno ha subrayado que se trabaja para continuar atendiendo a los vecinos afectados.

La secretaria general del PSOE andaluz, Susana Díaz, también ha trasladado su "apoyo" a los afectados y su "ánimo" a los servicios de emergencia que trabajan en la zona. "Mi apoyo a los afectados por el desbordamiento del río Campanillas en Málaga y mi ánimo a los servicios de emergencia que están trabajando codo con codo con los vecinos de la provincia".

Estos son los últimos coletazos de un temporal que hasta el momento ha dejado trece muertos y numerosos daños materiales; la borrasca impactó sobre todo en el mediterráneo: Cataluña, Comunidad Valenciana, Islas Baleares y Andalucía.

Ahora es momento de estudiar y hacer balance de las zonas afectadas. Ayer una comisión interministerial, presidida por Pedro Sánchez, acordó que el Consejo de Ministros del próximo martes apruebe los informes preliminares sobre los daños registrados para agilizar "cuanto antes" las ayudas.

Por ejemplo, hoy el conseller de Territorio de la Generalitat de Cataluña, Damià Calvet, ha cifrado en unos 15 millones de euros la inversión necesaria para reparar los desperfectos causados por Gloria en las zonas no urbanas del litoral catalán y ha avisado de que será preciso repensar cómo planificar las infraestructuras afectadas.

Sánchez visitó el jueves áreas de Cataluña y Baleares y este sábado ha estado en Murcia, donde se reunió con los alcaldes de las localidades del entorno del Mar Menor, y en Castellón; por la tarde tiene previsto ir a Teruel.

El jefe del Ejecutivo ha mostrado su preocupación por la situación de las zonas afectadas y el compromiso claro de su Gobierno de llevar a cabo actuaciones que aporten seguridad a la ciudadanía y eviten las repercusiones que está provocando el cambio climático en los últimos meses, según fuentes de la Delegación del Gobierno.