- El Recinto Ferial de Navarra (Refena), situado en el barrio de Buztintxuri de Pamplona, alberga desde hace diez días el mayor punto de muestreo de la Comunidad Foral de personas con síntomas de COVID-19. Gestionado por personal del Servicio de Urgencias Extrahospitalarias y enfocado únicamente a los profesionales denominados esenciales -sanitarios, policías y trabajadores del 112-, acoge diariamente la recogida de 150 muestras que son remitidas al Laboratorio de Microbiología del Complejo Hospitalario de Navarra, donde se obtiene un resultado en 24 horas. En total, han pasado por el circuito rápido de recogida de muestras 689 profesionales esenciales, de los cuales 194 han dado positivo (28%), mientras que los 495 restantes han arrojado resultado negativo (72%), por lo que si su estado de salud lo permite, se han reincorporado a sus puestos.

Antes de mudarse al recinto de Refena, en la avenida de Gipuzkoa de la capital navarra, el muestreo a profesionales esenciales arrancó el pasado día 14 de marzo en la Escuela de Seguridad y Emergencias de Navarra, en Beriáin. “Posiblemente fuimos los primeros de toda España haciendo los test PCR en un circuito rápido. Estuvimos dos días allí, pero como la previsión era que iba a llover, nos movimos y nos trasladamos a Refena, a cuyos dueños hay que agradecerles que su disponibilidad ha sido espectacular. También contacté con Policía Foral para que nos ayudara a organizarlo todo”, explica Diego Reyero, jefe del Servicio de Urgencias Extrahospitalarias y responsable del circuito rápido de recogida de muestras ubicado en Refena.

La centralización de los test en un único lugar permite agilizar la obtención de las muestras y su posterior análisis, con la correspondiente ganancia de tiempo. “Al principio creamos cinco equipos para realizar los muestreos a domicilio. Pero vimos que la forma de optimizar los recursos y el tiempo era crear un punto único de recogida de muetras. Esto también posibilita aumentar el número de pruebas y minimizar el contacto entre profesionales, así como reducir el uso del Equipo de Protección Individual (EPI) en estos tiempos de carestía”, subraya Reyero.

El acceso a los test PCR -diferentes de los test rápidos, que arrojan un resultado a los 15 minutos- se realiza a través de dos enfermeras del propio Servicio de Urgencias Extrahospitalarias, que dan citas en días y horas solo a los sanitarios, policías y trabajadores del 112 que muestren sintomatología de un posible contagio de coronavirus. Para ello se han habilitado teléfonos y correos electrónicos que son de conocimiento exclusivo de los trabajadores de los citados ámbitos.

La nave de Refena se encuentra abierta entre las 10.00 y las 13.00 horas, y por la tarde, entre las 16.00 y las 18.30 horas, horarios que permiten la obtención de 150 muestras de otros tantos profesionales esenciales. “Aunque comenzamos haciendo 50 tomas de muestras, posteriormente aumentamos a 75, ya estamos haciendo 150. La limitación de los tests viene determinada por la capacidad de análisis de las muestras. En el momento que el Laboratorio de Microbiología nos ha dicho que podían aumentar los análisis, hemos aumentado los tests”, explica Reyero.

Como si de un establecimiento de comida rápida se tratara, las personas que son objeto del muestreo conducen dentro de su propio vehículo hasta el interior de la nave principal de Refena, donde son recibidos por un administrativo del Servicio de Urgencias Extrahospitalarias que verifica la identidad. Posteriormente, una enfermera del mismo servicio realiza la recogida de las muestras: efectúa un frotis nasal y un frotis faríngeo con sendos bastoncillos que son guardados en cápsulas y en sobres que posteriormente son llevadas al Laboratorio de Microbiología. Todo el proceso se realiza mediante las máximas medidas de higiene, de modo que un técnico en emergencias sanitarias ayuda a la enfermera “a reemplazar los guantes cada vez que toma una muestra, con uso de gel hidroalcohólico, mascarilla, gafas de protección y bata”, explican los integrantes del equipo de recogida de muestras que trabaja en el recinto de Refena.

Una vez en el laboratorio, las muestras son sometidas a reactivos que permiten determinar si la persona de la que han sido obtenidas da positivo o no en COVID-19. “Los resultados son comunicados por el Servicio de Salud Pública y también por personal del propio Servicio de Urgencias Extrahopitalarias, que dan apoyo clínico a los afectados. En el caso de que el resultado sea positivo, la persona debe permanecer en cuarentena, mientras que si el resultado es negativo se puede incorporar al servicio, siempre que sus condiciones de salud lo permitan”, concluye Diego Reyero.