Se priorizan los test en residencias, que suman 112 fallecimientos

Hasta el momento, han fallecido en residencias de mayores 112 personas (41 con COVID-19 confirmado y 71 con síntomas) y hay 363 pacientes confirmados (de los que 40 están ingresados y los 323 atendidos en las propias residencias) a los que se suman otras 380 personas con síntomas compatibles con el virus. A esta situación se suman los 376 profesionales que trabajan en estos centros que también han sido contagiados o están en aislamiento.

Maeztu señaló ayer que Derechos Sociales afronta con distintas acciones el refuerzo preventivo en estos establecimientos y destacó que, entre ellas, se encuentra la realización de test. Precisó que hasta ayer del mediodía se habían realizado 800 pruebas en centros residenciales y que había 151 previstos para el día, siendo este grupo de población al que más pruebas se le han hecho. “Una cuestión lógica al tratarse de probablemente del grupo más vulnerable y que exige mayor protección y prevención”, dijo la consejera quien destacó el “sentido de ética y justicia social” con el que Navarra está actuando y mostró su “reconocimiento emocionado” a los trabajadores del sector, cuya “decencia, compromiso profesional y personal deben ser puestos en valor una vez mas”.

Tras pormenorizar los datos de la incidencia del coronaviruis en las residencias de mayores, con 112 fallecidos y más de 700 enfermos confirmados o con síntomas, en una población que supera las 5.000 personas, señaló que Derechos Sociales ha previsto un millón de euros para la atención a la población mayor en residencias, a través de distintas acciones, y que el 50% corresponde a personal. Añadió que también se han comprado 8.22o mascarillas, 163.800 guantes, 2.402 equipos de protección, 135 gafas y 400 pantallas para los centros.

Recordó que desde el inicio de la pandemia, Derechos Sociales organizo un dispositivo de seguimiento de las residencias de mayores, población mas vulnerable y el hecho de vivir en comunidad acentúa riesgo de contagios. Este equipo, integrado por 2 médicos, cuatro enfermeras y 7 terapeutas y hace seguimiento diario de los centros. A este dispositivo se ha sumado un refuerzo de enfermería aportado por Salud de 11 enfermeras-os y 5 auxiliares.

La monitorización de 71 centros de mayores y 49 de discapacidad permite conocer la situación y necesidades de cada residencia. A partir de esta información, se han realizado intervenciones en 7 residencias apoyando con asesoramiento, desplazando a residentes a otros centros, o con contratación de personal. Recordó la habilitación de plazas para usuarios con COVID-19 o síntomas en las residencias Félix Garrido de Sarriguren y Balneario de Fitero, a lo que se suma la iniciativa de la Meca de Pamplona de trasladar a residentes al hotel San Fermín de Burlada.

Añadió que en este momento, un 50,7 % de las residencias no tienen ningún caso confirmado de COVID-19, mientras que el otro 49,3 % presenta alguno. Un dato positivo es que tras la intensificación de las pruebas, se ha pasado de 29 a 36 centros que no presentan casos al haber sido negativas las pruebas en 7 centros que tenían casos con síntomas sin confirmar.

Las pruebas se están practicando también a profesionales, y este lunes próximo se realizará a la plantilla de los centros San Jerónimo de Estella y Nuestra Señora de Gracia de Tudela que sustituirá a quienes se encuentran conviviendo de forma permanente con residentes y salen para dar el relevo.

Maeztu comparte el mensaje del grupo de residencias Lares. La consejera de Derechos Sociales, Carmen Maeztu, tras destacar que las personas mayores y las residencias son el sector más vulnerable de la población donde, además, el 70% son personas dependientes y la inmensa mayoría con edad muy avanzada, quiso sumarse al mensaje que emitía Lares, que agrupa a la mayoría de residencias navarras públicas y sin ánimo de lucro, poniendo en valor el modelo humano y centrado en la persona de las residencias de Navarra. “Este departamento, el Gobierno, las residencias, y todo el personal de atención y cuidado, está haciendo todo lo humanamente posible para procurar la mejor atención a nuestros mayores sin escatimar ningún recurso”.

Servicio de atención espiritual. Desde ayer está en marcha el servicio de atención espiritual de los Arzobispados de Pamplona y Tudela que busca acompañar y dar respuesta a todas aquellas personas que buscan pedir consejo ante las situaciones generadas por la pandemia, realizar consultas sobre la vida cristiana y la experiencia de fe. Se puede acceder a este servicio a través del teléfono móvil 672 645 84 o escribiendo al correo electrónico atencionespiritual@iglesianavarra.org desde donde se acogerá a la persona que solicita ayuda. Este servicio estará en relación con otros servicios de ayuda a personas en dificultad como el Teléfono de la Esperanza y la atención de Caritas diocesana.

Día Internacional del Pueblo Gitano. Ante la imposibilidad de celebrar los actos previstos por las restricciones tomadas contra la propagación del COVID-19, Gaz Kaló ha adaptado la conmemoración a la situación actual. Por un lado, se ha animado a colgar la bandera gitana y también se realizará la lectura del manifiesto por streaming. Entre otras actividades, habrá un acto cultural online, mensaje institucional del Gobierno de Navarra y de dirigentes de organizaciones gitanas, y se ha animado a la ciudadanía a realizar vídeos personales para unirse a la celebración. Todos los actos se podrán seguir en la página de Facebook Día Internacional del Pueblo Gitano.

Profuturo ha donado 140 tabletas para el aprendizaje en casa. El programa de educación digital ProFuturo, impulsado por Fundación Telefónica y Fundación La Caixa, ha donado 140 tablets al Gobierno de Navarra para familias en situación de vulnerabilidad con hijos en edad escolar, para que estos puedan seguir formándose y aprendiendo desde casa. La distribución de estos dispositivos correrá a cargo del Departamento de Educación.