Salud, en coordinación con otros departamentos del Gobierno de Navarra y actores implicados, inicia esta semana la aplicación de un "amplio abanico de medidas para reforzar y adaptar los sistemas de detección y protección de la COVID-19".
Estas medidas se enmarcan en la nueva fase de evolución de la epidemia marcada por unos indicadores sanitarios "prudentemente positivos", la progresiva reactivación de la actividad económica y social, así como nuevos datos científicos y la existencia de test rápidos complementarios a la estrategia central en Navarra con las pruebas PCR.
Según este Departamento, la actual es una etapa que precisa también de "un liderazgo técnico importante desde Salud y Salud Pública y Laboral, además de la corresponsabilidad e implicación ciudadana". Se trata de una intervención "gradual, integral y multisectorial" que incorpora nuevas herramientas y materiales disponibles para evitar que los crecientes movimientos de población derivados de la reactivación laboral no reviertan la tendencia de reducción de contagios comunitarios y de la presión en el sistema sanitario.
El planteamiento incluye dos novedades técnicas (test rápidos y mascarillas), varios niveles de aplicación colaborativa y tres objetivos: cubrir a partir de hoy a toda la población de residencias de Navarra; incrementar esta semana el diagnóstico precoz y confirmado en los servicios de urgencias hospitalarios -ya en marcha- y en Atención Primaria; y aumentar la protección de profesionales sanitarios y sociosanitarios mediante los test rápidos y PCR.
En paralelo, el Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra, en contacto con el Departamento de Desarrollo Económico y Empresarial, las autoridades estatales, locales y agentes socioeconómicos, pondrá en marcha medidas informativas, de protección y supervisión para hacer compatible la seguridad y salud de los trabajadores y trabajadoras y la reactivación de la actividad productiva.
Mayor control en residencias: pruebas a personas residentes y personal sociosanitario
La detección precoz del virus en el ámbito sociosanitario ha sido una prioridad tanto del departamento de Salud como del de Derechos Sociales. En este sentido, durante la última semana se practicaron pruebas PCR a más de 1.200 residentes.
Sin embargo, por la alta presencia de infección en este ámbito y la vulnerabilidad de estas personas, se va a proceder a la realización de test diagnósticos a todas las y los residentes y al personal que atiende las residencias de personas mayores y de discapacidad, tanto a quienes presentan síntomas compatibles de coronavirus, como a quienes son asintomáticos.
Esta nueva dinámica se inicia desde hoy lunes en las residencias de mayor tamaño por los equipos de recogida de muestras del Servicio de Urgencias Extrahospitalarias (SEU).
Mayor precisión en población a través de Atención Primaria, que contará con los test rápidos
El segundo ámbito prioritario de aplicación del sistema reforzado de detección es el de Atención Primaria. Se realizará en dos sentidos: para nuevos casos y para los ya diagnosticados como "casos posibles" sin prueba.
En cuanto a lo primero, como ya sucede en las urgencias de los hospitales desde el pasado viernes, la prueba se realizará a los y las pacientes que entren por el circuito de "respiratorios", con síntomas compatibles con COVID-19 para proceder cuanto antes a confirmar esta patología de la que se derivan todas las medidas de atención y aislamiento.
También serán útiles para depurar aquellos "casos posibles" activos o acumulados (más de 11.000, por lo que puede haber un repunte estadístico) que han sido diagnosticados clínicamente. La realización de los test rápidos planteará ventajas tanto desde el punto de vista de las medidas de aislamiento y reintegración a su vida laboral como, a medio plazo, desde una perspectiva de estudio de la inmunización comunitaria. El test realizará con carácter voluntario.
Doble chequeo progresivo a profesionales sanitarios para aumentar su protección
El Departamento de Salud, a través del Servicio de Urgencias Extrahospitalarias y con la colaboración de la Policía Foral, sigue manteniendo el dispositivo de Refena, que ha permitido priorizar la protección a profesiones esenciales, entre ellas el personal sanitario y sociosanitario con síntomas.
Actualmente se está perfilando cómo practicar la prueba rápida y test de anticuerpos también a personal asintomáticos, empezando por determinados colectivos, por ejemplo, quienes hayan tratado pacientes con COVID-19. Se trata de un proceso que arrancará en los próximos días.
Esta nueva fase supondrá un refuerzo de la apuesta del Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea por tener "un potente y fiable sistema de detección", con hasta ahora más de 11.000 PCR, con un previsible incremento, además, de la capacidad y rendimiento de analíticas virológicas de laboratorio en el Complejo Hospitalario de Navarra, que pasarán de 500 a más de 1.000.
Información, prevención y vigilancia en el mundo laboral con enfoque sanitario
La novedad de esta semana es el reinicio de la actividad económica e industrial en determinados sectores, cuestión que genera, desde el punto de vista epidemiológico, dos situaciones.
Por un lado, van a darse concentraciones de personas tanto en espacios cerrados (plantas de producción) como abiertos (construcción, etc.) y, por otro, se producirá un mayor tráfico de personas en el trayecto de los domicilios al puesto de trabajo.
Estas situaciones se sumarán a quienes ya vienen protagonizando desplazamientos y contactos con población por razones laborales de servicios básicos (alimentación, limpieza€.). Conscientes de la necesidad de "compatibilizar la seguridad y salud de las y los trabajadores con la recuperación de la actividad económica", tanto el Gobierno de Navarra como el del Estado han tomado diversas iniciativas complementarias.
El Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra -que se ha ofrecido también para facilitar el acceso a empresas y personas autónomas a material de protección colectiva- mantiene "un contacto y colaboración constante" con el Departamento de Desarrollo Económico y Empresarial para abordar esta fase en el entorno laboral. De hecho, el Servicio de Salud Laboral ha remitido una misiva a las empresas y personas autónomas en la que ofrece a quienes no dispongan de servicio de prevención un asesoramiento del personal técnico del Servicio de Salud Laboral del ISPLN y de su mutua colaboradora de la Seguridad Social.
En ella se ve necesario que los servicios de prevención y el resto de las modalidades preventivas de las empresas concreten las medidas necesarias para trabajar en condiciones seguras, así como que los trabajadores y trabajadoras autónomas conozcan y cumplan unas medidas básicas de prevención y protección recogidas en la "Guía de buenas prácticas en los centros de trabajo", publicada por el Ministerio de Sanidad.
"El Servicio de Salud Laboral del ISPLN, en colaboración con la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, atenderá las demandas de asesoramiento así como los posibles incumplimientos en la aplicación de medidas preventivas frente al COVID-19 en su empresa", señalan en la carta.
Por otra parte, durante todo el día de hoy, el Servicio de Salud Laboral, ubicado en el polígono de Landaben, en Pamplona / Iruña, estará abierto para proveer de mascarillas quirúrgicas a las empresas y talleres que no dispongan y lo necesiten.
