- El pronóstico para la estación estival recién iniciada prevé lluvias, sobre todo en el norte, que se alternarán con periodos secos, y todo apunta que las protagonistas del verano serán sin duda las tormentas, que podrían venir acompañadas de granizo de gran tamaño con frecuencia. Dichas tormentas serán capaces de generar intensas rachas de viento que en algunos eventos podrán dejar vientos huracanados.

Esta previsión para el conjunto del Estado avanza periodos de lluvia más marcados en junio y agosto, siendo las tormentas las protagonistas de julio, aunque, como procede en este periodo estival, la Aemet y otros portales meteorológicos pronostican varias semanas secas con altas temperaturas, sobre todo en julio. En cuanto a las temperaturas, indican las fuentes consultadas que sufrirán cambios muy bruscos, pasando de valores muy por debajo de la media al extremo opuesto. En el norte, las temperaturas serán más bajas que la media y los contrastes pueden ser la tónica del verano ya que se espera que en algunos momentos se superen los 40o en el sur del Estado mientras que en el norte no se superen los 20o. Apuntan estos expertos que el mes más cálido será el de julio.

Este panorama contrasta con lo vivido hasta el momento ya que la Aemet, según expuso su delegado en Navarra, Peio Oria, con motivo del cambio estacional, "el año 2020 está resultando anormalmente cálido en la mayor parte del hemisferio norte".

La Aemet hizo balance de la pasada primavera en Navarra donde "las anomalías térmicas tuvieron un valor promedio para toda la comunidad de +1,7oC. Marzo fue normal, abril, muy cálido y mayo, extremadamente cálido, otorgando un carácter muy cálido al conjunto estacional. La distribución espacial de estas anomalías muestra valores entre +1,0oC -en Los Arcos- y +2,3oC -en Irurita, Isaba y Oroz-Betelu- con respecto a las normales climatológicas de referencia. De especial relevancia son las temperaturas mínimas con valores muy altos, especialmente en abril y mayo", destaca la Aemet.

Añade que, según los registros de la estación principal en Navarra, la del aeropuerto, "la primavera de 2020 ha sido extremadamente cálida, la segunda más cálida desde 1975, tras la de 2011. La anomalía ha sido de 1,6oC sobre la normal de referencia de 11,8oC, destacando especialmente las temperaturas de abril y mayo, en torno a 2,5oC por encima de los valores mensuales climatológicos".

De hecho, mayo ha sido el mes más caluroso desde al menos 1975 en la Cuenca de Pamplona con una temperatura promedio superior a los 17oC. Destaca por ultimo la Aemet que este mes de junio está presentando temperaturas claramente por debajo de lo normal, aunque se prevé que a partir de la próxima semana se asentarán la altas temperaturas normales de la época.