Ha fallecido este martes el doctor José Miranda Heras, pediatra y uno de los primeros profesores clínicos de la Facultad de Medicina de la Universidad de Navarra.

Nacido en Lodosa (1928), realizó la especialidad de Pediatría en Barcelona siguiendo la tradición familiar, su padre fue médico. Allí conoció al doctor Juan Jiménez Vargas, quien le propuso incorporarse a la Escuela de Medicina de la Universidad de Navarra en 1958; así como preparar el Departamento de Pediatría y Puericultura, materia que el curso siguiente (1959-60) ya se ofreció a los alumnos. También impartió la asignatura de Puericultura en la incipiente Escuela de Enfermería.

El doctor Miranda era conocido por su vitalidad arrolladora y su gran capacidad de emprendimiento. Bajo la coordinación del Dr. Eduardo Ortiz de Landázuri, uno de los médicos pioneros de la Clínica Universidad de Navarra, desempeñó una labor clave como profesor en las primeras clases prácticas a los estudiantes de Medicina.

La historia de la Facultad recoge las dificultades de los comienzos, cuando los carpinteros ni siquiera habían terminado la sala donde atender a los enfermos. Entonces, acudió con el Dr. Ortiz de Landázuri a su casa en Lodosa. "Entré en la consulta de mi padre, que estaba jubilado, y cargamos en la furgoneta todo lo que pudimos, incluida la mesa de exploración y el instrumental", relató el Dr. Miranda y que resume el libro de los 50 años de la Facultad de Medicina. Cuando lo tenían todo cargado, su padre les miró boquiabierto: "Pero, ¿qué haces?", le preguntó. "Nada, me llevo todo esto que ya no te sirve", le respondió un joven médico entusiasmado.

De Pamplona, Lodosa y Olite

También gestionó con el Hospital de Navarra la atención de los pacientes de medicina interna para que los alumnos pudieran tener sus lecciones prácticas y comenzó a atender a los primeros pediátricos. Así, el joven médico fue poco a poco recibiendo enfermos, primero de Pamplona y luego de otras localidades como Lodosa y Olite. "¿No tendrás algún paciente interesante para que puedan verlo los chicos?", preguntaba a sus compañeros colegiados. Asimismo colaboró de forma activa en los comienzos de la Clínica. Después de cuatro intensos años en los inicios del área sanitaria, en 1962 el Dr. Miranda se trasladó a Salamanca para trabajar como pediatra. A su vuelta a Pamplona sacó unas oposiciones de puericultor y tuvo una consulta en el instituto de Higiene, también se encargó de esta materia en la UNED.

El entusiasmo y la defensa de los menores fueron constantes en su trayectoria profesional. En 1977 impulsó la Asociación Navarra de Defensa de la Vida (ANDEVI), a la que dedicó todas sus energías hasta los 88 años. Siempre ha estado vinculado a esta iniciativa, como miembro fundador o como conferenciante e impulsor de numerosas actividades. Debido a su amplia experiencia como pediatra, en los últimos años disfrutó especialmente ayudando a las madres en situaciones de riesgo.