os sanitarios siempre están ahí cuando se les necesita. Una vecina de Pamplona, enfermera de profesión, y agentes de la Policía Municipal de la ciudad tuvieron que realizar maniobras de reanimación a un varón de 49 años, tras sufrir éste una parada cardíaca en el barrio pamplonés de la Txantrea. Los hechos se produjeron al filo de las once de la noche del viernes y la reanimación se alargo hasta la llegada de una ambulancia al lugar.
La Policía Municipal de la capital navarra, en declaraciones a este periódico, afirmó que recibió una llamada avisando de que un hombre se encontraba en el suelo con apariencia de no encontrarse bien, en la plaza Federico Soto, y cuando llegó se encontró a una mujer embarazada intentando reanimarlo. La mujer se identificó como enfermera y fue ella la que coordinó la reanimación.
Desde el cuerpo policial señalaron que el varón había sufrido una parada cardíaca y fue reanimado gracias al Desfibrilador Semiautomático y a las maniobras de reanimación cardiopulmonar. La enfermera tenía muchos años de experiencia a sus espaldas y fue ella quien dirigió todo dando indicaciones a los agentes desplazados hasta el lugar para que se turnaran durante las maniobras.
Este procedimiento se alargó hasta que llegó la ambulancia al lugar donde se encontraba la víctima. Fue entonces cuando consiguieron estabilizar al señor y fue trasladado al Complejo Hospitalario de Navarra. La Policía Municipal de Iruña aseguró que la enfermera “hizo un trabajo magnífico” y agradeció a la mujer “el trabajo realizado y la dirección de la reanimación en todo momento”.
La Policía Municipal de Pamplona destacó la magnífica actuación de la mujer y le agradeció, vía redes sociales, los servicios prestados.
