Un grupo de mujeres que fueron grabadas desnudas por el propietario de una agencia de modelos en Pamplona solicitaron ayer una reunión con el Parlamento de Navarra y con el Gobierno de Navarra para expresar su rechazo a la sentencia que condena al autor de los hechos a 115 años de cárcel, de los que cumplirá un máximo de cinco.

Estas mujeres, con el apoyo de Lunes Lilas, han dirigido sendos escritos al Parlamento de Navarra, al Instituto Navarro para la Igualdad y al consejero de Justicia del Gobierno foral para solicitarles un encuentro. "Para que se nos escuche ya que hemos sido ignoradas, ocultadas y desamparadas durante todo el proceso judicial, durante seis años", declaró la portavoz de las

El pasado lunes, Daniel Lucía, propietario de la agencia de modelos Dana Models, fue condenado a 115 años de cárcel por grabar a 129 mujeres desnudas, aunque cumplirá un máximo de 5 años, ya que el cumplimiento de la condena de prisión no podrá exceder del triple del tiempo de la pena más grave impuesta. La sentencia fue dictada de conformidad entre las partes y es irrecurrible.

En un comunicado leído durante la concentración de ayer, la portavoz, echando la vista atrás, recordó que en 2013, la mayoría de ellas menores por esa época, iniciaron un proceso que empezó "como un sueño casi recién cumplido, con mucha ilusión y ganas, pero que luego sería la peor pesadilla de nuestras vidas". Afirmó que en ese momento no sabían que "toda nuestra ilusión sería pisada y utilizada con el fin tan cruel como es el de no cuidar nuestra propia intimidad, grabando sin nuestro consentimiento nuestros propios cuerpos y con fines tan poco éticos que destrozarían nuestras vidas".

Seis años después, explicó que durante ese período de tiempo fueron silenciadas y no se les tuvo en cuenta durante ninguno de los procesos, así como tampoco se les facilitó información de los mismos. "El pasado 1 de febrero, se nos comunicó por mail la cancelación del juicio y que se había llegado a una sentencia de conformidad, en la que 120 chicas afectadas no hemos participado".

Finalmente, manifestó que desean "cerrar un capítulo muy duro", y que lucharán "por un cambio de leyes y un mundo en el que se escuche a todas las víctimas".

Experiencia traumática

Estefanía, una de las mujeres presentes en el acto, explicó que cuando sucedieron los mencionados hechos ella tenía 22 años. "En mi caso, aparte de grabaciones sí que hubo también intenciones, digamos gestos que tuvo, que yo los interpretaba como el cariño que me tiene un jefe. En ese momento no lo vi que era acoso".

La afectada subrayó que durante estos años ha necesitado psicólogos y medicación. "Pero el lunes que empecé a hablar con las chicas es cuando he empezado, digamos, a superarlo y a progresar en este asunto". Por otro lado, expresó su disconformidad con la cancelación del juicio. "La sentencia es algo que no ayuda nada, porque él acosador se puede llegar a pasar en prisión la mitad del tiempo de lo que yo he estado sufriendo, que son 6 años".

Por último, asegura que las leyes tienen que empezar a cambiar, y que lucharán para lograrlo. "Si podemos ir al Parlamento, lo que sea para lograr cambios, lo haremos, por nosotras y por las que no han podido hacerlo.