Navarra ha inoculado ya al menos una dosis al 90% del grupo de entre 66 y 69 años, un tramo de edad que se había quedado atrás en el proceso de vacunación por distintos motivos pero que ahora ya ha concluido prácticamente la admisión de la primera dosis. De hecho el pasado 28 de abril, tan solo el 5,1% de las personas pertenecientes a este grupo había recibido una vacuna, un porcentaje que destacaba con el resto de grupos mayores de 60 años, que ya tenían con al menos una dosis al 70% de su población. Sin embargo, en estas dos últimas semanas el departamento de Salud ha priorizado a este tramo etario y ya el 90% tiene al menos un fármaco inoculado y más del 10% ha completado la pauta.

De esta manera, más del 95% de las personas mayores de 60 años tiene al menos una dosis puesta y ya se avanza en la inoculación de segundas dosis, algo con lo que se espera terminar a lo largo de este mes de mayo, salvo con quienes reciban dosis de AstraZeneca, que deberán esperar tres meses para recibir la segunda dosis.

En concreto, Salud comenzó a vacunar a este grupo una vez que se finalizó con la inoculación de la primera dosis a los mayores de 70 años y que estaba muy avanzada la del grupo 60-65 años. Estas personas de entre 66 y 69 años se habían quedado atrás en el proceso de vacunación por diferentes razones: suministros, tipo de vacunas y condicionantes técnicos de edad, especialmente de AstraZeneca, que primero se administraba solo a menores de 55 años, luego se amplió hasta los 65 años, para finalmente restringirse entre los 60 y los 70 años. Así, según explicó la consejera de Salud, Santos Induráin, en una rueda de prensa, “se han quedado entre dos líneas de avance”: una que venía de arriba abajo (la del grupo 70-79 años) y otra que se había comenzado por debajo de ellos (el subgrupo 60-65 años), una vez que se estableció en su día que AstraZeneca no se utilizará por el momento en menores de 60 años.