El tráfico pesado internacional que circula por la N-121-A y la reivindicación para desviarlo de los Ayuntamientos y vecinos afectados divide al Gobierno de Navarra y a sus socios. Mientras que el consejero de Presidencia, Igualdad, Función Pública e Interior del Gobierno de Navarra, Javier Remírez, ha manifestado este martes que “no hay motivos ni argumentos suficientes” para hacerlo con “plena seguridad jurídica”, Geroa Bai y EH Bildu creen que puede ser oportuno, al menos temporalmente, durante las obras de mejora de la carretera.

Remírez, en comparecencia parlamentaria a petición de EH Bildu, ha asegurado que “según los datos de los que disponemos, ni el desarrollo de la obras en los tramos 1 y 2 -para la conversión de la N-121-A en una vía 2+1-, ni las restricciones en Francia están suponiendo mayores problemas”, para añadir que “la prioridad en todo momento para el Gobierno de Navarra es reducir la siniestralidad de la N-121-A y mejorar su seguridad”.

En este punto, el consejero ha querido subrayar que “las distintas alternativas están sobre la mesa y si se diera el caso, estuviera motivado y se viera necesario podrían contemplarse posibles restricciones al tráfico pesado”, pero incidió n que en estos momentos “los datos son los que son”. “Siempre actuaremos con el máximo rigor desde el ámbito de la seguridad jurídica para evitar, en lo posible, escenarios de judicialización que generan incertidumbres y confusión y que, es más, de no estar bien motivadas, a la larga, pueden suponer consecuencias para las arcas públicas en concepto de indemnizaciones”, ha expuesto.

En este sentido, incidió en que “para regular y, en su caso, restringir el tráfico de vehículos pesados tanto en esta carretera como en otras vías equivalentes, es preciso que tales medidas estén justificadas y basadas en estudios que acrediten que dichas medidas son las más adecuadas al fin buscado”. Según informes de la Policía Foral, “en los últimos cinco años, de los 14 accidentes mortales, con 19 personas fallecidas, solamente en un caso se achaca la responsabilidad a un vehículo pesado o camión”, ha comentado.

DE FORMA TEMPORAL

En el turno de los grupos, Adolfo Araiz, de EH Bildu, ha discrepado con Remírez, ya que a su juicio, “puede haber elementos y circunstancias que en estos momentos justifiquen de forma temporal” restricciones al tráfico pesado en la N-121-A y advirtió de que “los problemas son continuos y durante todos los fines de semana”.

Desde Geroa Bai, Blanca Regúlez defendió que “mientras duren las obras tanto de acondicionamiento de la vía 2+1 como de acondicionamiento de los túneles se debe explorar esta vía de restricción de paso internacional de vehículos pesados”. A su juicio, “puede ser una medida necesaria para la zona dando respuesta a las solicitudes de la población de esa zona” y ha remarcado que “tenemos un aval judicial a este tipo de restricciones”. “Se debe estudiar por parte del Gobierno una actuación de tipo temporal en esta vía en cuanto a restricciones de vehículos pesados”, insistió.

Ainhoa Aznárez, de Podemos, ha manifestado que “ya era hora de que se tomasen” las medidas que se han ido adoptando para la N-121-A y ha considerado que el Gobierno “se ha encontrado con una situación que viene desde hace muchos años y está dando una solución tomando cartas en el asunto”. “Mano tendida para dar solución a esto que viene lastrándonos desde hace mucho tiempo”.

Por su parte, la parlamentaria de Navarra Suma Isabel Olave ha calificado de “desconcertantes” las “incoherencias” existentes entre los socios de Gobierno sobre el desvío del tráfico por esta vía y dijo que “esta es la peor de las situaciones para que las empresas de logística y transporte confíen en Navarra”. “Se necesita coherencia en los planteamientos”, ha defendido la parlamentaria.