- El senador autonómico de Navarra, Koldo Martínez (Geroa Bai), presentó en el Senado una propuesta para crear un registro voluntario de personas que padecieron abusos sexuales en su infancia. "Buscamos con ello dar mayor visibilidad a esta lacra y que se conozca la dimensión real y el verdadero alcance de esta práctica, consentida o, incluso, amparada en algunos casos por la Iglesia", señaló Koldo Martínez.

El senador navarro afirmó que, "aunque la nueva ley orgánica de protección integral a la infancia y la adolescencia extiende hasta los 35 años la edad a que empieza a contar el plazo de prescripción de estos delitos, son muchas las víctimas que tienen ya entre 60 y 80 años que no van a poder denunciar esos abusos y para los que no va a haber justicia y, al menos, la creación de un registro voluntario y anónimo de quienes padecieron abusos les permitiría que la sociedad supiera el calvario que pasaron". Koldo Martínez explicó que esta propuesta "parte de varias víctimas navarras y confiamos en que pueda debatirse y aprobarse en el Senado".

El senador afirmó que "el delito de pederastia también se produce hoy con mucha frecuencia", aunque apuntó que "seguramente, la disminución evidente de sacerdotes y enseñantes religiosos ha reducido esta incidencia en el ámbito de Iglesia católica". "Por eso hoy es más frecuente en el ámbito familiar y de las actividades deportivas, de ocio, en los grupos de acción infantil y juvenil. Y ocurre mientras los progenitores y los responsables del cuidado de las y los menores ni lo sospechan", dijo.

Martínez enmarcó su iniciativa en "la necesidad de no abandonar en el olvido a quienes sufrieron esas agresiones y que en muchos casos no han podido superar el trauma causado por ella". "Mantener vivo el recuerdo no implica espíritu de venganza ni auto consumirse en el odio hacia quien abusó de estas personas. Es un camino hacia la justicia de reparación, un cauce en el que poder declarar sin vergüenza lo que sucedió. Les basta la comprensión, la escucha, pero les falta la verdad y el registro de víctimas les puede ayudar a sentirse más arropados y comprendidos y romper así con el silencio impuesto por la Iglesia y otras instituciones", señaló el senador de Geroa Bai.