El año pasado Goizargi no pudo celebrar su 18 aniversario juntos, “nos encontrábamos en pleno confinamiento, en los meses más duros de la pandemia”. Sara Ancín, miembro de la asociación Goizargi y responsable del área de Sensibilización e Impacto social, relataba que “este año, con 19 años a las espaldas, viendo que la situación sociosanitaria mejoraba y el clima de junio nos acompañaba, decidimos salir a la calle y que cualquier persona se pudiese acercar para que podamos hablar un poco sobre la importancia del duelo y la muerte”. En el Paseo Sarasate de Pamplona se afincaron con una exposición repleta de una serie de dibujos y el cartel del Camino del Duelo, que contaba con unos códigos QR, que permiten a los visitantes escuchar testimonios en primera persona. Los 148 dibujos son producto de la lectura de un cuento de la asociación titulado Un día todo cambio. “Pedimos a los profesores, profesoras, padres y madres que les leyeran el cuento a los más txikis y que después ellos realizarán un dibujo sobre lo que les hubiera transmitido la historia”, subrayó.

Llamar a las cosas por su nombre

Llamar a las cosas por su nombre“Cuando vemos una silla, la llamamos silla. Cuando alguien se ha muerto, se ha muerto y es importante insistir en el peso que tiene la palabra”, señaló Marta Tapia, psicóloga de Goizargi. “Hay que llamar a las cosas por su nombre para poder asumir los conceptos, porque las personas cuando se van pueden volver, pero las personas muertas no vuelven”, resaltó para añadir “que es importante incidir en ello porque con consciencia no utilizamos la palabra muerte porque no queremos”. “Por nuestra educación entendemos la muerte como un tema tabú, algo que se oculta porque no es agradable”, expresó.

El miedo al olvido

El miedo al olvidoDesde la asociación decimos que los muertos están muertos, pero están a través del recuerdo”, narró Marta Tapia. “De repente nos damos cuenta que podemos volver a vivir y nos da miedo olvidad a la persona que ha muerto”, explicó, “aunque no olvidamos, solo implica que el dolor cambia y es muy difícil olvidar porque el amor no termina con la muerte”. “Aceptar que tenemos derecho a vivir y eso no implicas que me vaya a dejar de doler ni que vaya a olvidar, porque sigue en nuestro recuerdo”, añadió.

Camino del duelo Estar triste no es agradable, pero se necesita pasar por distintas fases para asimilar el dolor. “Nuestro Camino del Duelo son unas serie de fases, etapas que la persona decide seguir, porque es su decisión para aceptar esa realidad”, explicó Nati Labairu, psicóloga de Goizargi. “Es un proceso temporal, intimo, único y personal, pero a su vez también tiene unos factores comunes”, apuntó la profesional. “Aunque nosotras mostramos este esquema, no es necesario que se cumplan en orden, pero son los puntos por los que es necesario pasar para aceptar ese duelo”, aclaró. En lo referente a casos mediatices como el asesinato de Anna y Olivia de Tenerife, “la sociedad debe dejar de valorar la situación de la madre, de si “está muerta en vida”, porque eso es una manera de decirle a esa persona que nunca podrá rehacer su vida, ni superar ese duelo. Como sociedad debemos aceptar que todos somos capaces de superar lo que sea y nadie debe juzgar cómo superamos una tragedia, porque es una decisión personal”, señaló Labairu.