Tras el reconocimiento aéreo realizado a primeras horas de esta mañana los responsables del operativo del Servicio de Bomberos Navarra / Nafarroako Suhiltzaileak han decidido mantener un amplio retén de vigilancia en la zona incendiada del Vedado de Eguaras, al observar puntos humeantes y rescoldos que impiden dar por extinguido definitivamente el fuego.

Aunque ha bajado la temperatura, las condiciones meteorológicas siguen siendo adversas y no permiten descartar posibles rebrotes, por lo que permanecen en el lugar brigadas forestales y bomberos, 33 personas en total, de los parques de Lodosa, Estella, Tafalla, Tudela y Peralta, además de la BHIF, estando previsto relevos con efectivos del parque de Sangüesa. Los dos helicópteros del Gobierno de Navarra se turnarán para continuar arrojando agua sobre los lugares donde se observe humo o brasas.

Colabora con los bomberos personal del Guarderío Forestal del Gobierno de Navarra, así como agentes de la Policía Foral y voluntarios de Cruz Roja.

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Incendio en el Vedado de Eguaras, en las Bardenas

Ayer no se produjeron incidencias destacadas y si tampoco se registran a lo largo de la jornada podría ir retirándose parte del retén, para a continuación declarar extinguido el incendio iniciado durante la tarde del pasado martes durante la cosecha de un campo de cereal, que ardió extendiéndose al arbolado del Vedado de Eguaras causando un daño medioambiental muy elevado al tratarse de una zona de alto valor ecológico. La Presidenta María Chivite, que visitó ayer el lugar acompañada por el vicepresidente Javier Remírez y el presidente de Bardenas Reales, José María Agramonte, adelantó que, a falta de las mediciones definitivas, el fuego podría haber afectado al 80-90% del enclave.

La presidenta Chivite explicó ayer que "está desde el jueves ya estabilizado, aunque todavía no se puede dar por controlado. Se prevé poder extinguirlo en las próximas horas, si las condiciones climatológicas lo permiten". De esta forma se esperaba que si el viento que reinó ayer durante toda la jornada (de entre 30 y 50 kilómetros/hora) no reaviva viejos focos, hoy se podría dar por extinguido. A todas estas características hay que añadir los más de 42 grados registrados ayer y un día extremadamente seco, con una humedad por debajo del 6%. "La situación variará de nuevo en torno a las ocho de la tarde, cuando el viento girará y soplará de norte, más fresco y húmedo, pero en dirección a zonas que no se han quemado lo que supone un riesgo añadido. Todo ello hace que cualquier rebrote pueda descontrolarse con unas consecuencias imprevisibles", explicó ayer el director de Bomberos de Navarra, Francisco Javier Baldanta, algo que pudo controlarse.

Además añadió que aunque hoy o mañana se declarara extinguido "los bomberos mantendrán retenes y siempre habrá unidades durante unos días, con guardas también de Bardenas viniendo a revisar, para no dejarlo de la mano". El temor de todos los implicados es que las altas temperaturas y los fuertes vientos del Sur puedan reavivar algún rescoldo en algún momento, por lo que decidieron mantener en el lugar dotaciones forestales y personal de los parques de Tafalla, Sangüesa, Lodosa y Tudela, además de dos Brigadas Helitransportadas contra Incendios Forestales (BHIF) con sus helicópteros. Así mismo, permanece en el lugar personal del Guarderío Forestal del Gobierno de Navarra. Cuentan con el apoyo de un bulldozer y vecinos de Valtierra con tractores, que realizan labores de desbroce y cortafuegos, y de voluntarios de Cruz Roja, que prestan labores de avituallamiento e intendencia.

Por todo ello, la presidenta Chivite pidió también "prudencia", porque el fuego, aunque está estabilizado, no está completamente controlado. "Los equipos tienen que seguir trabajando", recalcó, sobre todo, ante las condiciones climatológicas adversas que se prevén para el día de hoy (por ayer).

El incendio del Vedado de Eguaras se encuentra estabilizado

El incendio del Vedado de Eguaras se encuentra estabilizado

Durante la visita de Chivite los bomberos explicaron cómo la primera noche "fue muy fuerte", "trabajamos muy duro" porque de donde comenzó el incendio, en el campo que trabajaba la cosechadora, hasta el castillo de Peñaflor llegó en apenas 10 minutos y les separan unos 3 kilómetros, "había chispas que saltaban más de 100 metros". El miércoles la situación volvió a estar descontrolada con más de 4 kms de frente de fuego en algunas ocasiones y con focos cambiantes, según las rachas del viento.

En el lugar la sociedad de cazadores de Milagro, Caparroso y Valtierra había un grupo de unos 10 ó 12 corzos y ciervos a los que se cuidaba especialmente y cuyo paradero se ignora. También en estas 1.200 hectáres había zorros, jabalíes, gatos monteses, lirón careto, buitres en los cortados. Buena parte han desaparecido del lugar en el que impera el silencio. Alrededor del castillo todo son cenizas que no alcanzaron a los restos porque no existe vegetación en este icono del vedado. "Veremos si se puede hacer algo por recuperarlo, dependerá de muchas cosas", dijo el presidente de Bardenas.