La Cámara Foral celebró ayer un acto de adhesión a la lucha contra el cáncer infantil que, organizado junto a Adano en el marco de la campaña Enciende la Esperanza, se ha dirigido a visibilizar, concienciar y reivindicar un protocolo estándar para paliar los efectos tardíos y las secuelas que en muchos casos sufren estos menores. La enfermedad afecta a unos 250.000 niños, niñas y adolescentes.