Cuidado, porque puede pasar desapercibido y puede provocarnos un sobresalto antes de coger el avión. Desde el pasado 1 de febrero el pasaporte covid caduca a los 9 meses, tras un cambio normativo de la Comisión Europea que establece que a los 270 días desde la última dosis el certificado ya no es válido para viajar, una decisión que se tomó debido a la generalización de la tercera dosis para reforzar la inmunización.
Por ello, toca hacer cuentas y memoria para viajar esta Semana Santa e incluso en verano. A una persona que fue vacunada en verano del año pasado, completando la pauta con dos dosis antes del 18 de julio y que no haya recibido un tercer pinchazo, se le caducará el pasaporte este Jueves Santo a no ser que presente un test negativo o un certificado de haber superado la enfermedad. Sin embargo, para este último todavía es necesario haber dado positivo en una PCR, prueba con la que apenas se han confirmado casos en las últimas olas, en las que han predominado las pruebas de antígenos -tanto las realizadas por personal sanitario como los autotest de farmacia-, que no son válidas para obtener esta vía del certificado.
Esta decisión, que no casa con el dictamen de Salud Pública de recomendar a aplazar la dosis de refuerzo a los cinco meses de haber pasado la covid, afecta a centenares de personas contagiadas por ómicron.
Si se obtiene el pasaporte por un test negativo la vigencia es de 72 horas, mientras que el certificado de recuperación tiene una validez de 180 días.
