Antequera (Málaga). La crisis económica se deja sentir también en el mundo del deporte, y en el Balonmano Antequera está golpeando con tanta fuerza que técnicos y jugadores de la primera plantilla decidieron a lo largo de esta semana declararse en huelga legal para llamar la atención sobre los retrasos en el pago de sus sueldos.

De manera que, tras diversas reuniones con las autoridades políticas del Ayuntamiento para buscar soluciones de urgencia, sin resultado, y tras gestiones a diversos niveles con idéntica falta de éxito, la directiva se vio obligada a acudir a la base para alinear a jugadores del segundo equipo y juveniles, y sólo seis, porque otros no fueron admitidos por la Federación.

Con este panorama se desarrolló todo un choque de Liga Asobal y es que jugando contra seis y además varios de ellos de categoría juvenil, el partido perdió todos los alicientes.

Así las cosas, estaba claro lo que iba a pasar ante un grande de la Asobal como el Amaya Sport San Antonio, que acudía al encuentro con todo su potencial, sobre todo para asegurarse el resultado, por si la huelga se desconvocaba a última hora.

El Amaya Sport comenzó el encuentro dispuesto a sentenciar y luego dejó transcurrir los minutos, aunque de vez en cuando se les escapara un ramalazo de juego que causaba estragos en la jovencísima escuadra local.

Una novel escuadra que fue el foco de todas las miradas, y pese a todo salió a dejarse el alma. Sin poder relevarse para tomarse un respiro, en inferioridad numérica todo el tiempo, tuvo agallas para marcar algún gol, incluso algunos muy buenos, pero poco pudo hacer más que aguantar con vergüenza torera los minutos. El Amaya Sport San Antonio, aún sin emplearse a fondo, en un dilema para su entrenador sobre si atacar fuerte o no, apiadándose de los locales, moviendo mucho su banquillo para que jugaran los menos habituales, iba tomando ventaja.

Fruto del rival que tenía enfrente, los de Pamplona eran discretos en sus ataques al llegar al descanso, mientras los de Lorenzo Ruiz tuvieron fuerzas, porque ánimos no les fallaron, ni les faltaron desde una grada que no cesó de animarles ni un segundo.

En la segunda parte, con visos de goleada del siglo, el envite se paró considerablemente y es que los de Amaya Sport San Antonio pusieron pausa ante la inferioridad más que evidente de los locales. Pese a la insultante diferencia entre unos y otros, aún así hay que destacar el gran papel del portero Fran Palacios, destellos de calidad en todos los demás, y garra para soportar lo que se les vino encima.

Con todo decidido sobre la pista, el poco más de medio millar de espectadores se ensañó contra la directiva y los jugadores con gritos de "¡Mercenarios!" y "¡Esta afición no os la merecéis!". Seguro que la huelga del primer equipo del Antequera pasará factura y se oirá y mucho estos próximos días.

Por su parte, el Amaya Sport San Antonio demostró que no quería conseguir la goleada del siglo, por respeto a los profesionales del Antequera que estaban de huelga y de los seis chavales que ayer tenía delante, y se llevó los dos puntos que necesitaba para consolidar su séptimo puesto en la tabla y no perder la estela del sexto, el CAI Aragón.