Arrate trata de exprimir su última opción con un aval de la Kutxa

pamplona. Arrate va a intentar por todos los medios seguir en Asobal. Para ello, como ya se adelantó ayer, el club eibarrés ha pedido un aval bancario de 150.000 euros a la Kutxa para que, junto con los 300.000 que la Diputación de Guipúzcoa les otorgará en caso de seguir en Asobal, pueda seguir en la máxima categoría. La caja de ahorros contestó ayer que le responderá el lunes, día límite de entrega del aval bancario a Asobal. Aunque todo parece indicar que no se lo otorgarán debido a todos los problemas que arrastra. En primer lugar, por la gran deuda que posee el club eibarrés (1.900.000 euros), y en segundo, porque la semana pasada los jugadores dejaron de entrenar después de que el club les diera la carta de libertad por la mala situación económica del Arrate. Y aunque, a pesar de que los jugadores de casa siguen entrenando porque los extranjeros se han marchado, lo más probable es que el ente bancario no le conceda el dinero ante tal situación. Por su parte, otra noticia que se hizo oficial ayer fue que Toledo ha rechazado jugar la próxima temporada en Asobal y se mantendrá en División de Honor debido, en palabras de su presidente, Jesús Cabañas, a que prefieren "tener una temporada tranquila, sanear el club, y tener un futuro sin deudas".